La receta del gazpacho de cereza que está triunfando
Una original forma de comer fruta en verano es añadirla al gazpacho
Durante los meses de julio y agosto, gazpachos, salmorejos y vichyssoise bien fríos están presentes en nuestras mesas casi a diario. Aunque si hablamos de gazpacho, automáticamente viene a nuestra mente la clásica y típica receta del tradicional gazpacho andaluz. Sin embargo, en el afán de los cocineros, que emplean técnicas de cocina de vanguardia, por buscar la originalidad en la presentación, los colores, las texturas y los sabores de sus platos han surgido nuevas recetas en torno a este clásico de la gastronomía española.
Mientras que para preparar el tradicional gazpacho andaluz se necesitan tomates de pera, pimientos verdes italianos, pepinos, dientes de ajo, pan de hogaza duro, aceite de oliva virgen extra (AOVE), vinagre de Jerez y un toque de sal. Recientemente, han surgido otras variantes alrededor de esta típica bebida de verano del recetario español. El gazpacho de cereza y queso ricotta, el cual aprenderemos a cocinar a continuación, el gazpacho de fresas, el gazpacho de sandía, el gazpacho de melón, el gazpacho de mango o el gazpacho de aguacate, son algunas de estas originales y modernas opciones para disfrutar de un gazpacho diferente.
Ingredientes necesarios
Si quieres elaborar tu propio gazpacho de cereza y queso ricotta en casa, no te dejes impresionar por su nombre, ya que su receta no es complicada, ni nada tediosa. Además, no presenta la menor dificultar, por lo que, aunque no seas muy habilidoso, ni tengas una gran destreza en las artes culinarias del cocinado, podrás preparar fácilmente este original gazpacho con el que sorprender a tus comensales.
Los ingredientes o materias primas que debes comprar y que encontrarás fácilmente en cualquier supermercado son: 250 gramos de tomates maduros (puedes escoger la variedad que más te guste), 150 gramos de cerezas maduras, medio diente de ajo, 70 gramos de pepino, 35 gramos de cebolla tierna, media cucharadita de vinagre de manzana, dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra (AOVE) y sal al gusto. Además, te harán falta 40 gramos de cerezas más para la guarnición. Mientras que, para el queso ricotta necesitarás un litro de leche entera y el zumo de medio limón y sal.
¿Cómo prepararlo?
Como nuestro gazpacho va a ser totalmente casero, vamos a preparar nuestro propio queso ricotta. Para ello, hay que poner el litro de leche entera en un cazo casi a hervir (es necesario que la leche esté caliente, pero que no llegue a ebullición 100ºC) por lo que recomendamos que vigiles la temperatura. De tal forma, que cuando la leche esté a punto de hervir, hay que apagar el fuego y agregar un poquito de sal. Inmediatamente después, y mientras se remueve la leche con una cuchara, se va agregando el zumo de medio limón, (es necesario dejar reposar esta mezcla durante 15 minutos).
Por otro lado, preparamos el gazpacho. Es necesario tener a mano el vaso de la batidora, en cual introducimos los tomates bien lavados y troceados, el medio diente de ajo pelado (al que hay que retirar el brote), un trocito de pepino pelado y sin semillas y un trocito de cebolla tierna. También añadimos las cerezas previamente deshuesadas, un poquito de sal, media cucharadita de vinagre de manzana, dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra (AOVE).
Una vez que se tienen todos los ingredientes en el vaso de la batidora, los batimos hasta que estén completamente triturados. Después, hay que pasar la mezcla por un colador o por un chino y meterla a enfriar al frigorífico durante unas horas. Mientras el gazpacho se enfría, ha llegado el momento de comprobar como el queso ricotta ya se ha cuajado. Hay que escurrirlo, para ello se emplea una venda o una gas (es importante no tirar el suero sobrante, puedes utilizarlo en alguna receta de aprovechamiento como bizcochos o pan, también para ablandar la carne).
Poco a poco, nuestro queso ricotta irá perdiendo humedad, para ayudarle en este proceso es importante prensar bien el queso con suavidad hasta eliminar la máxima cantidad de suero que podamos. Y guardarlo en frío sobre un colador un par de horas. Para finalizar, sirve tu gazpacho de cereza bien fresquito en un plato sopero. Emplea como guarnición unas lascas de queso ricotta y unas cerezas a modo de decoración por encima.