Aprende a preparar el pastel de calabaza con caramelo más esponjoso
El tamizado de la harina y de la levadura junto con el empleo de un molde de goma son los trucos de este postre
El pastel de calabaza con caramelo es un postre sencillo de preparar, pero con un resultado espectacular. Su textura esponjosa y su suave sabor a calabaza se complementan perfectamente con el toque dulce del caramelo. Además, se prepara en un momento, lo que lo convierte en el pastel ideal para los que no dispongan de tiempo.
Su combinación de sabores y texturas, que mezcla la suavidad de la calabaza, la cremosidad del queso y el toque dulce del caramelo, lo convierten en un desayuno, merienda o postre perfecto para compartir en cualquier ocasión. Además de ser delicioso, es muy fácil de preparar con ingredientes accesibles y un proceso que no requiere de técnicas complicadas.
Receta del pastel de calabaza con caramelo
El pastel de calabaza más esponjoso
Ingredientes
- 1 kilo de calabaza
- 1 chorrito de agua
- 400 gramos de leche condensada
- 100 gramos de queso crema
- 2 huevos
- 1 cucharadita de azúcar avainillado
- 150 gramos de harina de trigo
- 6 gramos de levadura
- 100 gramos de azúcar
- 2 cucharadas de agua
- 1 chorrito de zumo de limón
Elaboración paso a paso
- Mezclar la leche condensada, el agua, el cremo crema y los huevos con la batidora.
- Cocer la calabaza.
- Añadir la calabaza a la mezcla anterior y volver a batir hasta obtener un puré de calabaza.
- Tamizar la harina, la levadura y el azúcar avainillado.
- Agregar la mezcla de los ingredientes secos al puré de calabaza.
- Preparar el caramelo en una sartén durante cinco minutos removiendo.
- Hornear 75 minutos.
- Refrigerar 4 horas.
¿Qué ingredientes lleva?
Necesitarás para la masa del pastel: un kilo de calabaza pelada y troceada, un chorrito de agua, 400 gramos de leche condensada, 100 gramos de queso crema, dos huevos, una cucharadita de azúcar avainillado, 150 gramos de harina de trigo, 6 gramos de levadura. Y para el caramelo: 100 gramos de azúcar, dos cucharadas de agua y un chorrito de zumo de limón.
Método de elaboración paso a paso
En primer lugar cuece la calabaza. Para ello, coloca los trozos de calabaza en un recipiente amplio, añade un chorrito de agua y cúbrelo con plástico film. Y mete al microondas a máxima potencia durante diez minutos. Si tienes tiempo, puedes cocerla en un cazo con agua hirviendo hasta que esté tierna.
A continuación, escurre el exceso de agua y pasa la calabaza con una batidora hasta obtener un puré suave y sin grumos. Después, en un bol grande, mezcla el puré de calabaza con la leche condensada y el queso crema. Y bate bien hasta que los ingredientes estén completamente integrados.
Luego, añade los huevos y el azúcar avainillado (es importante tamizar la harina y la levadura sobre el puré, así el pastel quedará más esponjoso). Mezcla todos los ingredientes hasta que se integren con con el puré de calabaza dando lugar a una mezcla homogénea.
Para el caramelo casero hay que añadir a una sartén los 100 gramos de azúcar, las dos cucharadas de agua y un chorrito de zumo de limón. Y dejar que el caramelo se haga solo, sin moverlo, hasta que adquiera un color dorado, lo que tardará unos cinco minutos.
El molde empleado para el pastel de calabaza tiene que ser circular y de unos 18 centímetros de diámetro aproximadamente. A dicho molde, añadimos primero el caramelo y encima de éste, la masa de la tarta. Para poder hornearlo, hay que precalentar el horno a 180°C, y colocar el pastel sobre la rejilla a media altura con calor arriba y abajo.
Hornea el pastel durante 75 minutos. Y espera a que enfríe, dentro del molde refrigéralo durante un mínimo de cuatro horas para que adquiera la textura ideal. Y una vez frío, coloca un plato encima y da la vuelta con cuidado para desmoldarlo, como si fuera una tortilla.
Cómo conservar el pastel
Para guardar el pastel de calabaza hay que cubrirlo con papel film, para que no absorba olores de otros alimentos. Así, puede aguantar entre cinco y siete días en buen estado si se conserva en el frigorífico. Su sabor y textura se mantienen mejor si se consumen en frío, por lo que es un postre ideal para preparar con antelación.
Qué bebidas tomar con el pastel
Un espresso o un café negro sin azúcar resalta las notas especiadas y terrosas de la calabaza.El té chai, con su mezcla de especias como canela, clavo y jengibre, complementa los sabores cálidos del pastel. La cremosidad de un vaso de leche equilibra la textura densa y dulzor del caramelo del pastel, aportando suavidad.
Una sidra de manzana caliente equilibra su acidez y los sabores del caramelo y la calabaza. Mientras que un vino dulce, como un moscatel o un vino de postre, puede realzar el carácter caramelizado del pastel. Incluso un chocolate caliente espeso marida perfectamente.