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Al menos 20 narcotraficantes presos deja operación militar en Río de Janeiro

En lo que va de año, según asociaciones de la sociedad civil, en todo el estado de Río se han registrado unas 4.000 muertes en actos de violencia.

Al menos 20 narcotraficantes presos deja operación militar en Río de Janeiro

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Al menos 20 supuestos narcotraficantes han sido detenidos el viernes durante una operación realizada por las Fuerzas Armadas brasileñas, la Fuerza Nacional de Seguridad y la Policía regional en cuatro favelas del centro de Río de Janeiro, han informado fuentes policiales

Cerca de 1.700 hombres, entre militares, miembros de la Fuerza Nacional y de las policías Civil, Militarizada y Federal han rodeado a primera hora de la mañana las favelas de São Carlos, Zinco, Querosene y Mineira, con el apoyo de 10 blindados, según ha divulgado en una nota la Secretaría de Seguridad regional.

Los militares y los policías han sido recibidos a tiros cuando han llegado a las comunidades, informa EFE.

La operación ha tenido por objetivo cumplir varios mandatos de prisión, aunque no ha sido divulgado el número, así como buscar armas, munición y drogas.

Entre los buscados hay algunos de los bandidos que el mes pasado han invadido la favela de Rocinha, la mayor de Río de Janeiro, y que han protagonizado durante una semana intensos tiroteos en la comunidad contra el bando de narcotraficantes que domina la barriada.

En otro operativo, en las comunidades de Lins de Vasconcelos, en la zona norte, participaron unos 300 policías en busca de presuntos implicados en la muerte del coronel Luiz Gustavo de Lima Teixeira, de la Policía Militar (PM), una fuerza encargada de la seguridad pública, que en Brasil depende de la autoridad de cada Estado.

El principal sospechoso de ese crimen es un joven de 22 años, por cuya captura las autoridades han ofrecido 5.000 reales (unos 1.500 dólares).

Además de los detenidos, las autoridades han incautado 500 papeletas con marihuana y cinco kilos de cocaína.

Río de Janeiro vive una inusitada ola de violencia desde la celebración de los Juegos Olímpicos de 2016, que ha obligado al Gobierno del presidente Michel Temer a enviar a unos 10.000 miembros de las Fuerzas Armadas para reforzar la seguridad en la región, con la perspectiva de que permanezcan allí hasta finales de 2018.

El programa de seguridad puesto en marcha en 2008 por el gobierno regional para intentar expulsar a los narcotraficantes que dominaban varias de las favelas de esta ciudad ha dado resultados en sus primeros años. También ha conseguido reducir los índices de criminalidad, pero las bandas de pistoleros han logrado volver a las barriadas.

En lo que va de año, según asociaciones de la sociedad civil, en todo el estado de Río se han registrado unas 4.000 muertes en actos de violencia.

El estado de Río de Janeiro, el más turístico de Brasil, también afronta una de las mayores crisis económicas de su historia, después de que en junio del año pasado, poco antes de organizar los Olímpicos de 2016, declarara «calamidad financiera» (quiebra), lo que ha provocado una reducción de los gastos para pagarle horas extras a los policías.

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