Iñaki Urdangarin viajó a Suiza para despedirse de la infanta y de sus hijos
El todavía marido de la infanta Cristina viajó a Ginebra para reunirse con su familia y para, presumiblemente, preparar el comunicado que luego se hizo público
Gtres
Ha pasado una semana desde la publicación de las fotografías que fueron el preludio de la ruptura del matrimonio de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin. En ellas, el exduque de Palma caminaba por la playa cogido de la mano de una misteriosa rubia de la que poco a poco se conocieron más detalles.
No era un paseo de dos amigos, era un momento de intimidad entre dos personas que tienen algo más que una simple amistad. Lo que no se sabía era si esto era una infidelidad o era el principio de una nueva etapa vital de quien todavía era el marido de la hija mediana del rey emérito.
Fue la revista Lecturas la que sacó a la luz el polémico reportaje y también la que, una semana después, vuelve al quiosco con una nueva exclusiva en la que Urdangarin es de nuevo el protagonista de su portada. «Iñaki se despide de Cristina y sus hijos», titula la publicación. En su interior, un reportaje completo del viaje express que realizó el pasado fin de semana a Ginebra.
Una escapada previa al envío del comunicado conjunto en el que anunciaron la interrupción de su relación matrimonial. Fue una reunión familiar en la que estuvo la expareja y sus dos hijos pequeños. Pablo no pudo estar presente por tener que cumplir con sus compromisos profesionales, mientras que de Juan no se ha podido confirmar su presencia ni si también se trasladó al que fue su hogar durante años.
Iñaki Urdangarin, diez horas de viaje en coche
El pasado viernes, y a pesar de la cantidad de medios de comunicación apostados a las puertas del bufete de abogados en el que trabaja Iñaki, este abandonó su puesto de trabajo mucho antes que el resto de sus compañeros. Algo que estaba justificado, ya que horas después puso rumbo a Ginebra en su propio vehículo.
Más de mil kilómetros conduciendo hasta Suiza para reunirse por primera vez con su todavía mujer y sus hijos, tras conocerse su nueva relación con su compañera de trabajo, Ainhoa Armentia. No hay que olvidar que, para salir de territorio español y debido al tercer grado penitenciario, el vasco necesita un permiso especial del juez.
Tras diez horas de viaje, Urdangarín llegó a Ginebra, según la revista. Allí había aterrizado su hijo Miguel procedente de Londres -estudia Ciencias del mar-, y en la que fue su casa familiar durante el caso Nóos, le esperaban la infanta e Irene, la pequeña de sus cuatro hijos. Según los datos que maneja la revista, allí permanecieron durante todo el sábado.
El domingo por la mañana fue el momento del adiós. Iñaki y su hijo Miguel abandonaron la vivienda rumbo al aeropuerto. Allí tuvo lugar una emotiva despedida entre padre e hijo que atestiguan las fotografías que lleva la revista en su interior. El joven cogió un avión de vuelta a Londres y su padre enfiló el camino de regreso a Vitoria, después de pasar 72 horas muy complicadas.
El esperado comunicado
El lunes fue un día intenso para Urdangarin y Ainhoa Armentia. Ambos comenzaron la semana yendo a trabajar a primera hora de la mañana, como han hecho desde que se tuvo conocimiento de su relación. Pero a mediodía, la agencia EFE, hacía público un escueto comunicado enviado por Cristina e Iñaki. «De común acuerdo, hemos decidido interrumpir nuestra relación matrimonial», comenzaba diciendo la expareja.
«El compromiso con nuestros hijos permanece intacto. Dado que es una decisión de ámbito privado, pedimos el máximo respeto a todos los que nos rodean». De esta manera hicieron oficial su separación, sin dar más detalles de los términos de esta. Pero eso sí, dejando claro que lo más importante para ambos son sus cuatro hijos.
Hasta ese momento los únicos que se habían pronunciado habían sido Pablo Urdangarin y su padre. En menos de 24 horas los dos acertaron a responder las preguntas de la prensa de una manera similar como así afirmó el excuñado del rey Felipe VI: «Es una dificultad que afrontaremos con la máxima tranquilidad posible y juntos, como siempre hemos hecho».
La infanta Cristina, en ‘shock’
Mientras Lecturas cuenta cómo se desarrollaron los acontecimientos el pasado fin de semana, ¡Hola! ha podido hablar con el entorno más cercano de la hermana del rey y de su exmarido. Al parecer, doña Cristina no tenía conocimiento de esta nueva relación del padre de sus hijos. Lo supo horas antes y solo pudo creer lo que le habían contado cuando tuvo en sus manos la publicación.
El exduque de Palma no le había dicho nada a su mujer. Ni el pasado verano, ni cuando viajaron a Barcelona para animar a su hijo Pablo en uno de sus partidos de balonmano, ni siquiera cuando estuvieron esquiando en Baqueira en Navidad. Lo que ha ocurrido no era algo que sospechara. Fuentes consultadas por la revista afirman que tanto Cristina como Iñaki tenían previsto retomar su vida en común en Suiza, al menos hasta el mes de diciembre.
Estas mismas fuentes indican que las imágenes de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia no fueron premeditadas: «Se relajaron y les pillaron». Pero lo cierto es que ni aun a sabiendas que todo iba a salir a la luz, ni la infanta ni su ex, hicieron algo para evitar el escándalo en el que se han visto envueltos esta última semana.
