'Crowdfunding' en palacio: el príncipe Carlos de Inglaterra presta ocho millones a su hermano
El heredero al trono ha decidido seguir los pasos de la reina, dándole un préstamo al duque de York para sufragar el acuerdo con el que ha evitado ser juzgado
Unos andan a la gresca por la herencia y otros tienden su mano a su familia a pesar de lo que eso signifique. Eso ha ocurrido en Inglaterra, donde el príncipe Carlos ha decidido seguir los pasos de la reina Isabel y ayudar a su hermano Andrés. El heredero al Trono británico le dará una gran cantidad de dinero que servirá para abonar parte del acuerdo extrajudicial al que se llegó con Virginia Giuffre. Un acuerdo por el que el duque de York ha conseguido librarse de ser juzgado por las acusaciones de supuestos abusos sexuales vertidas sobre él.
A mediados de febrero se supo que tras meses enfrentándose a esta batalla judicial, el príncipe Andrés alcanzó un pacto con la demandante. Y uno de los puntos no era otro que el que apuntaba a que el duque deberá pagar a la norteamericana más de 14 millones de euros. Un montante que irá a parar a la organización benéfica creada por Giuffre, Victims Refuse Silence, que ofrece apoyo a las víctimas de abusos y violencia sexual.
Según los medios británicos, su madre ya le ha dado casi dos millones y medio de euros, y el lunes el Daily Mail publicaba que su hermano mayor también hará su propia aportación para que pueda solventar la cantidad acordada. Será un préstamo de ocho millones de euros provenientes de los ingresos privados del heredero, que le será devuelto cuando el príncipe Andrés consiga vender su casa suiza de Verbier.
El príncipe Andrés reconoce a Virginia Giuffre como víctima
The Sun afirma que Andrés tiene diez días para cumplir con el pago. También explica que tiene que pagar a tiempo y que, por eso, «hubo discusiones familiares sobre cómo ‘tener un poco de aquí y un poco de allí’». Aparte de la cantidad acordada, poco más se sabe del acuerdo ya que, ambas parten firmaron no poder hablar en público ni del caso ni de lo pactado.
Eso sí, en el mismo documento el duque acepta que Virginia Giuffre «sufrió como víctima de abuso los ataques públicos injustos que se dirigieron contra ella». Pero el príncipe Andrés no reconoce su culpabilidad. Desde un primer momento negó su participación en dichos supuestos abusos y así ha continuado: «Se sabe que Jeffrey Epstein traficó con numerosas niñas durante años. El príncipe lamenta su relación de amistad con él y alaba la valentía de la señora Giuffre y la de otros supervivientes».
El príncipe Andrés ha evitado por todos los medios ir a juicio
El juicio estaba previsto para el próximo otoño, pero tras el convenio, los abogados de ambas partes solicitaron la suspensión de los plazos y las diligencias del juicio. Desde que se tuvo conocimiento de este pacto, el pasado 15 de febrero, el magistrado tenía un plazo de 30 días para hacer eficaz la demanda del sobreseimiento. Es precisamente el juez Kaplan quien tiene la potestad de archivar el caso, algo que rechazó hacer en diciembre a petición de la defensa.
En aquel momento los abogados del príncipe Andrés se apoyaron en un escrito de 2009 firmado por Virginia Giuffre. En él renunciaba a perseguir a Epstein «y a otros potenciales acusados» por los casos de supuestos abusos sexuales, a cambio del pago de más de medio millón de euros. El juez argumentó el rechazo a este documento al considerar que las acusaciones contra el duque de York no eran las mismas que contra el productor de Hollywood.
La postura del príncipe Carlos de Inglaterra y el resto de la familia
Este gesto del heredero al trono ha sorprendido en cierto modo a la opinión pública. Según los medios locales, tanto él como su hijo mayor, el príncipe Guillermo, fueron dos bastiones a la hora de tomar decisiones respecto a la figura de Andrés tras conocerse el veredicto de la justicia estadounidense. «Se trata de la supervivencia de la institución a toda costa. Siempre lo ha sido y siempre lo será», expresó una fuente cercana a Palacio a uno de los tabloides.
Todo tras la decisión de la reina Isabel II de despojar a Andrés de sus privilegios, así como de sus títulos militares. Así se anunció el 13 de enero a través de un comunicado oficial que rezaba lo siguiente: «Con la aprobación y el acuerdo de la reina, las afiliaciones militares y los patrocinios reales del duque de York han sido devueltos a la soberana. El duque seguirá sin asumir ninguna función pública y defiende este caso como ciudadano privado».
Con estos gestos tanto de Isabel II, como del príncipe Carlos de Inglaterra y del príncipe Guillermo -ambos futuros reyes de Inglaterra-, parecía que el príncipe Andrés estaba más solo que nunca. Al menos así se entendió de puertas para afuera de Palacio. Algo que no ocurrió con su exmujer, Sarah Ferguson, y sus dos hijas en común, Beatriz y Eugenia. Las tres no han tenido reparo en mostrarse al lado del duque desde que saltó el escándalo. Y así sigue siendo.