Entre Shakira y Gerard Piqué no es todo de color de rosa

Como cualquier pareja, la relación de Shakira y Gerard Piqué no es perfecta al ciento por cierto. El futbolista del Barcelona, de 35 años, y la cantante colombiana, de 45, llevan juntos desde 2010. Aunque han atravesado algún que otro bache, ya son 12 años de noviazgo, y es normal que surjan tiranteces de vez en cuando.

La pareja, que tiene dos hijos en común –Sasha y Milan Piqué Mebarak, de 8 y 6 años–, a veces discute por tonterías, como todo hijo de vecino. Así lo ha revelado Shakira en una reciente entrevista con la periodista Holly H., presentadora del podcast Planet Weird.

Lo que Gerard Piqué detesta de Shakira

En la entrevista, Shakira ha hablado sobre su carrera profesional, pero también acerca de su vida personal. En concreto, de lo que Gerard Piqué odia de ella.

«Mi pobre marido, mi novio, mi chico… como quieras llamarlo, ¡tiene que esperarme siempre tanto tiempo! Está cansado de esperar. Porque la hora colombiana no es la misma que la catalana, esto es, la española», confesó entre risas, desvelando así que uno de sus mayores defectos es la impuntualidad.

«Su mente [la de Gerard] está estructurada de una forma y la mía pues no… Aunque me he vuelto mucho más puntual desde que lo conocí. Pero las veces que realmente nos peleamos es porque yo llego tarde y él me espera despierto», añadió.

Pasaron una crisis de pareja en 2017

Esta no es la primera vez que Shakira habla de baches en su relación, aunque lo recientemente mencionado sea anecdótico. No lo fue así la crisis de pareja que vivieron en 2017.

Aquel año, la colombiana tuvo problemas en sus cuerdas vocales hasta el punto de quedarse sin voz. Todo esto le obligó a cancelar su gira El Dorado y casi se ve obligada a abandonar la música para siempre. Esto agrió su carácter hasta el punto de estar todos los días «enfadadísima», tal y como desveló ella misma hace dos años en el documental El Dorado World Tour.

«Gerard me ha visto muchas veces llorar porque yo pensaba que no podría volver a retomar mi carrera. […] Me decía que no quería un futuro con una mujer amargada, que todos estaban haciendo música por ahí mientras yo estaba encerrada en casa con los niños. «Sal ahí y ponte a trabajar», me decía», relató la propia cantante.

Este bache supuso un antes y un después en su relación, pero finalmente todo salió bien: ella volvió a la música y ellos retomaron su amor.