Froilán la lía en un parking de Mallorca con su hermana y sus primos dentro del coche
Froilán de Marichalar y Borbón tuvo un percance en un parking de la isla, pero por fortuna todo se solucionó en pocos minutos
Froilán se encuentra en Mallorca junto a su familia y, como es habitual, ya ha dado la nota. El hijo de la infanta Elena y Jaime de Marichalar ha vuelto a copar las páginas de los medios locales por los sucesos en los que sólo él se ve envuelto con asiduidad.
El joven, de 24 años, tuvo un percance en un parking de la isla, pero por fortuna todo se solucionó en pocos minutos. A pesar de la poca gravedad del asunto, ya es el tercer suceso notable en el que Froilán se ha visto envuelto en las últimas semanas.
Froilán la lía en un parking de Marbella: pierde el ticket y no puede salir
Como decíamos, las vacaciones mallorquinas de la Familia Real ya han comenzado. Felipe, Letizia y sus hijas, Leonor y Sofía, aún no han llegado a Marivent. Quienes sí lo han hecho han sido la infanta Cristina, la infanta Elena y algunos de los hijos de ambas, como Froilán, Victoria Federica, Pablo y Miguel Urdangari, quienes se han dejado ver por el club de Calanova, detalla el Diario de Mallorca.
Este club náutico es casi una segunda casa los primos, ya que pasaron muchos veranos practicando en sus instalaciones. Por eso, siempre que pueden regresan, como en esta ocasión, cuando sucedió el percance del que te hablábamos al comienzo.
Froilán y sus primos dejaron el club sobre las 23:30 horas para ir a Marivent, donde les esperaban sus madres. Todos ellos se subieron al coche, que estaba aparcado en el parking y que era conducido por Froilán, con su hermana en el asiento del pasajero y los primos en el trasero.
Y lo que ha dado que hablar y ha saltado al mencionado diario local es la que lió Froilán para salir del parking con el Audi que conducía. El joven había perdido el ticket del parking privado de Casanova y tras intentar encontrarlo, con toda la familia dentro del auto, tuvo que pedir ayuda a los ciudadanos que pasaban por allí, quienes, obviamente, quedaron sorprendidos.
Finalmente, Froilán solucionó este imprevisto que aunque no grave sí es curioso, y regresó a Marivent junto a sus primos.
Froilán, de polémica en polémica
Como te contábamos, Froilán va de polémica en polémica. El hijo mayor de la infanta Elena se encontraba el pasado sábado celebrando su 24 cumpleaños junto a sus amigos, en la discoteca Opium de Marbella, cuando un rifirrafe entre unos clientes desembocó en un tiroteo que se saldó con cinco heridos.
«Salieron corriendo despavoridos del local», han dicho varios testigos. No hubo trato de favor hacia él a la hora de evacuarle del lugar, como se ha llegado a insinuar. Lo cierto es que cuando parecía que la tranquilidad había llegado a la vida del sobrino de Felipe VI, la casualidad le volvió a poner en el ojo del huracán con este tiroteo, a lo que hay que sumarle lo del parking.
Un supuesto intento de secuestro
A principios del mes de mayo, el nombre de Froilán volvió a estar en boca de todos por un robo con fuerza sucedido en una casa de Ibiza en la que suele alojarse con sus amigos cuando visita la isla pitiusa. Las primeras informaciones apuntaban a que el joven se encontraba en el interior de la vivienda y se habló de la posibilidad de un intento de secuestro.
Tras las pesquisas iniciales, los medios locales explicaron que todo había quedado en un susto e indicaron que ni el sobrino del rey Felipe ni el resto de sus amigos, entre los que estaba Aitor Gutiérrez -hijo de Guti y Arancha de Benito-, se encontraban en el lujoso chalet ubicado en una de las exclusivas urbanizaciones de la isla.
Froilán, expulsado de otra discoteca
Dos meses antes de este asalto al chalet ibicenco, a finales de febrero, Felipe Juan Froilán vivió un momento de lo más bochornoso. ¿El motivo? Erigirse como improvisado animador en uno de los locales de moda de la capital donde estaba disfrutando de una noche de fiesta junto a su grupo de amigos.
En medio del fragor de la velada, Froilán decidió hacerse con los mandos de una pistola de dióxido de carbono, que suelen utilizarse para ‘crear ambiente’ y disparar a los jóvenes que bailaban y se lo pasaban en grande. «Iba muy, muy contento», aseguró uno de los testigos al portal Algo Pasa TV.
«Empezó a chillar y a bailar» y fue cuando varios miembros de seguridad del local «le invitaron a irse de buenas formas», añadió otro de los jóvenes que vivió todo lo ocurrido. Lo cierto es que, a pesar de haber sido expulsado, esta anécdota no fue a más y tanto Froilán como sus amistades terminaron la noche en otra discoteca madrileña.
Cuando se pegó un tiro en el pie
Si hay un incidente protagonizado por Froilán que destaca sobre los demás es el ocurrido el 9 de abril de 2012. Froilán tenía 13 años y se disparó de manera accidental en el pie.
El niño estaba de vacaciones con su padre, con quien se trasladó a Soria para disfrutar de esos días de descanso. Ambos pensaron que hacer prácticas de tiro sería un buen plan para pasar una jornada de asueto.
Según la información que se publicó entonces, Froilán llevaba la escopeta con el cañón mirando hacia abajo cuando se produjo el disparo involuntario. Se le hizo una primera cura en la tierra natal de su progenitor, y de ahí se le trasladó a la madrileña clínica Quirón, donde pasó por quirófano debido al estado de su pie, que había sufrido el impacto de varios perdigones. Y aunque su madre y su abuela transmitieron tranquilidad, la polémica se desató porque el pequeño aún no había cumplido la edad legal para poder hacer uso de armas.