Malas noticias para la Casa Real inglesa: por qué Carlos III estará más tiempo hospitalizado
El actual rey de Inglaterra será intervenido de la próstata en los próximos días y su hospitalización se alargará aún más
Que el rey Carlos III tendrá que someterse a una operación, en los próximos días, no es ninguna novedad. El actual monarca de Inglaterra padece un tumor benigno en la próstata por el que tendrá que pasar por quirófano. Este problema se ha traducido en un agrandamiento de la próstata que podrá conllevar graves consecuencias en un futuro si no se trata. Por eso, el Rey está dispuesto a ponerle solución y pasará por quirófano la semana que viene. Ahora, se ha podido saber que el equipo médico le ha recomendado al monarca que permanezca más tiempo de lo planteado hospitalizado, ya que la recuperación se prevé que será más larga.
Tal y como publica la revista Hello!, los especialistas le han recomendado a Carlos que extienda los días de baja y retrase su incorporación a sus funciones públicas hasta dos semanas. Aunque eso sí, todo esto teniendo en cuenta que no se haya producido ningún inconveniente en el postoperatorio. Quien sí que se ha encontrado con algún que otro problema justamente después de su operación ha sido Kate Middleton, quien ha sido intervenida por una dolencia abdominal.
Por qué Carlos III tendrá que estar más tiempo en el hospital tras su operación
De esta manera, la princesa de Gales estará alejada del foco público hasta, por lo menos, Semana Santa. Esto se debe a que fue intervenida hace unos días y todavía se encuentra dentro del centro hospitalario. Sí que es cierto que, desde un primer momento, había una infinidad de dudas sobre el verdadero estado de salud de la futura reina de Inglaterra. Sobre todo, conociendo todos los detalles de la complicación de Carlos, pero teniendo muy pocos datos sobre la situación de Kate Middleton. Además, llama poderosamente la atención que los medios de comunicación ingleses no hayan dado la última hora de salud de la mujer de William.
Probablemente esto se deba, como ya hemos publicado en THE OBJECTIVE, a que desde la prensa británica quieran proteger a Middleton y, sobre todo, debido a la buena relación que se ha forjado entre los medios de comunicación y los actuales príncipes de Gales. Desde la Casa Real inglesa sí que dieron una infinidad de detalles sobre el problema de salud del Rey, alegando que esto era favorable para «alentar a otros hombres que puedan estar experimentando síntomas a hacerse controles, de acuerdo con los consejos de salud pública».
Qué le pasa a Kate Middleton
Así, el Rey ha tenido que cancelar cada una de las reuniones y de los actos públicos que tenía planteados para las próximas semanas. Por tanto, y debido a la baja también de su nuera, tendrá que ser su mujer Camila y su hijo, el príncipe William, quienes vayan en su representación. Ha sido la reina consorte quien ha afirmado que su marido se encuentra «bien» y que su deseo es volver al trabajo «lo antes posible». Aunque eso sí, como ya hemos comentado, esto todavía se extenderá más días en el tiempo.
Sí que es cierto que volverá a la vida pública mucho antes de que lo haga Kate Middleton. Sobre todo después de conocer que la Princesa ha sufrido un contratiempo en su recuperación que hará que esta se alargue más de lo esperado. Mucho se ha especulado sobre la verdadera razón por la que la mujer del príncipe William fue intervenida. Así, desde distintos medios, se apuntó a que podía estar provocado por una diástasis abdominal que se había producido después de sus tres embarazos. También, se habló de algún problema canceroso, que fue totalmente descartado una vez que el palacio de Buckingham lo desmintió en un comunicado.
Estos dos contratiempos en la salud del rey Carlos y de Kate Middleton han provocado que Meghan Markle y el príncipe Harry se pongan en contacto con la Familia Real. Lo hacen en un momento especialmente complicado de su relación. Sobre todo, después de que los duques de Sussex abandonaran Inglaterra y fuera la actriz quien apuntara distintos detalles que ensombrecieron la dignidad de la Casa Real británica.