Rusia vuelve a atacar Kiev tras el hundimiento de su buque insignia
La capital ucraniana y la ciudad de Lviv, en el oeste, han vuelto a registrar bombardeos un día después de que Rusia advirtiera de un aumento de su ofensiva
Las bombas siguen devastando el centro y este de Ucrania. Un día después del hundimiento de su buque insignia, Rusia ha redoblado la presión sobre Kiev con varios bombardeos, que han dejado cuantiosos daños materiales y al menos un fallecido. El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, ha denunciado una serie de explosiones ocurridas esta pasada madrugada en las afueras de la capital ucraniana. Como ya sucediera el viernes, los ataques han vuelto a asolar ciertos barrios de la capital de Ucrania, a pesar que las tropas rusas se retiraron hace una semana de la zona y las autoridades aseguraron que concentrarían sus esfuerzos militares en el este del país.
Además, una fábrica en la que se producen tanques en la afueras de Kiev ha sido blanco de un ataque aéreo este sábado, según ha apuntado la AFP, que reporta que un importante número de militares y policías acudieron al lugar e impedían el acceso al complejo industrial, de donde brotaba una humareda. El ataque ha sido confirmado por el portavoz del Ministerio de Defensa, general Igor Konashenkov, dentro de una ofensiva que ha alcanzado a «16 objetivos enemigos», todos «destruidos con misiles de alta precisión, incluidos equipos, almacenes y arsenales».
Los ataques se producen un día después del hundimiento del crucero lanzamisiles Moskva (Moscú), buque insignia de la Flota del Mar Negro. Aunque el Kremlin no ha responsabilizado directamente a Ucrania de lo ocurrido, si que ha amenazado con aumentar «el número y la escala de los ataques con misiles a objetivos en Kiev en respuesta a cualquier ataque terrorista o acto de sabotaje en territorio ruso cometido por el régimen nacionalista de Kiev». Una respuesta que no se ha hecho esperar.
Una de las explosiones más potentes ha ocurrido en Darnitski, en las inmediaciones al sureste de la capital, ha añadido el alcalde Kiev en su canal de Telegram. Aunque de momento se desconoce el número exacto de heridos o fallecidos en estas detonaciones, las autoridades han confirmado que al menos hay una persona muerta.
Por otro lado, también en Kiev y sus alrededores, las autoridades han encontrado ya más de 900 cadáveres de civiles, la mayoría con signos de haber sido ejecutados, tras la retirada de las tropas rusas. De ellos, 350 han sido hallados en la localidad de Bucha, según ha informado el jefe de la policía ucraniana en esta región, Andriy Nebytov.
Casi todos los 900 civiles encontrados en la región que rodea a Kiev habrían sido asesinados a tiros. «La presencia de heridas de bala indica que muchos simplemente fueron ejecutados», han apuntado los agentes de policía. Según Nebytov, los cuerpos fueron abandonados en las calles o recibieron entierros sumarios y el 95% murió por heridas de bala.
También en las últimas horas las autoridades locales ucranianas han denunciado bombardeos rusos en el centro del país, comenzando por el impacto de un misil contra un aeródromo militar en Kirovogrado, según la Alcaldía. Asimismo han denunciado al menos un muerto y tres heridos en un bombardeo ruso sobre la disputada localidad de Donetsk, en el este del país, así como ataques en la céntrica localidad de Poltava, que también han dejado un fallecido. También ha habido bombardeos en Lviv, en el oeste, donde las alarmas antiaéreas han estado sonando toda la noche.
200 niños muertos desde el comienzo de la guerra
La Fiscalía de Menores de Ucrania ha denunciado que al menos 200 niños han muerto y más de 360 han resultado heridos en ataques perpetrados por Rusia desde el comienzo de su invasión del país, el pasado 24 de febrero, hasta este sábado.
La mayor parte de las víctimas infantiles, contando fallecidos y heridos, se han registrado en la región de la capital, Kiev, con 121, seguida de Donetsk, con 115, Járkov (88), Chernígov (54), Mikolaiv (40), Jersón (29), Zaporiyia (22), Yitomir (15) y Sumy (16).
Asimismo, la Fiscalía ha denunciado que 1.018 instituciones educativas han registrado daños materiales desde el principio de la invasión, 95 de las cuales han quedado completamente destruidas.
Según las estimaciones de Naciones Unidas, 1.982 civiles han muerto y 2.651 han resultado heridos desde el comienzo de la guerra. De ellos, 162 niños han muerto y 256 han sufrido heridas, de acuerdo con el balance de la ONU hasta este pasado viernes.