Cinco muertos y varios heridos en un tiroteo en un hospital de Oklahoma, Estados Unidos
Por el momento se desconoce la identidad del autor ni la motivación que ha podido tener para llegar a asesinar a dichas personas
Agentes y personal de emergencia cerca del lugar donde se ha producido un tiroteo mortal en Oklahoma. | Reuters
Cinco personas han muerto y varias han resultado heridas este miércoles en un tiroteo registrado en el Hospital Saint Francis de Tulsa (Oklahoma, Estados Unidos). Esta matanza se ha producido tan solo unos días después de que un joven asesinase a 19 niños y dos adultos en otro tiroteo, en esa ocasión en una escuela de Uvalde (Texas).
«Tenemos cuatro civiles que están muertos y tenemos un tirador que fallecido», ha dicho el vicedirector de la policía de Tulsa Eric Dalgleish a los medios.
Según apunta Europa Press, la Policía ha indicado que el atacante ha muerto. «Un sospechoso ha sido abatido. No sé en este momento si le disparamos o él mismo se disparó», ha explicado el sargento Richard Meulenberg tal y como recoge la cadena estadounidense CNN.
Meulenberg ha relatado que «en este punto, podemos confirmar que el atacante está muerto» y los agentes están revisando todas las habitaciones del edificio «en busca de amenazas adicionales».
Con motivo de la investigación, los agentes encargados de la misma están revisando «múltiples pisos» para descartar que haya más fallecidos. Y es que en el edificio hay «cientos de habitaciones y cientos de personas» y están tratando «esto como una escena catastrófica en este momento».
Por su parte, Darin Glodo, del departamento de Policía de Tulsa, ha comunicado la existencia de heridos, pero sin dar más detalles sobre la gravedad o no de sus estados ni el número de afectados.
«Los agentes han acudido inmediatamente a la segunda planta donde se ha producido el tiroteo, cuando han llegado allí han encontrado a unas cuantas personas heridas de bala, un par de ellas estaban muertas en ese momento», ha precisado Meulenberg a ABC News.
Armas usadas en el tiroteo
El atacante, un hombre de raza negra y de entre 35 y 40 años, portaba dos armas: un rifle de largo alcance y una pistola (aunque no se sabe si ha utilizado ambas armas para la masacre).
Por el momento se desconoce la identidad del autor ni la motivación que ha podido tener para llegar a asesinar a dichas personas.
