La OTAN prepara un ejercicio de disuasión nuclear tras la escalada en la guerra de Ucrania
Las maniobras, de carácter anual, se producen en un momento en el que el mundo se ve alertado por la amenaza atómica por primera vez desde la Guerra Fría
Después de unos días en los que en la guerra de Ucrania se percibe una escalada, con la voladura por parte de Ucrania del puente que une la península de Crimea con Rusia y la respuesta de estos bombardeando las principales ciudades del país, la OTAN ha anunciado este martes que la semana que viene comenzará su ejercicio anual de disuasión nuclear, según ha informado el secretario general, Jens Stoltenberg.
La pérdida de territorio en las provincias ocupadas por parte de Rusia ha sorprendido al mundo al ver que la superioridad terrestre del ejército de Vladimir Putin, no es tan poderosa como se esperaba en un principio. Esta nueva fase de la guerra puede crear una sensación de miedo e incertidumbre en Rusia que puede llevar al presidente del país a tomar decisiones drásticas, por desesperadas, para marcar territorio dentro de los órganos de poder, que podrían cuestionar cada vez más al jefe del Estado, si el ejército ucraniano continúa su avance hacia la frontera rusa.
Ante esto, la forma más expeditiva que tiene el ejército ruso de contrarrestar el avance ucraniano es tirar mano del arsenal nuclear para ocasionar graves bajas y poder recuperar el territorio perdido desde que Ucrania lanzó su ofensiva sobre Kharkiv, en el norte, y sobre Jersón, en el sur.
Por lo tanto, la guerra atómica es un escenario que vuelve a amenazar al mundo y ante esto, la OTAN ha decidido comenzar la próxima semana los ejercicios anuales de disuasión nuclear con el objetivo de garantizar que su capacidad es «segura, protectora y eficaz», según ha afirmado Stoltenberg en declaraciones recogidas por la agencia EFE.
El ejercicio de la Alianza se realiza cada año, pero este es diferente al existir realmente la posibilidad de una guerra atómica que, como vienen recordando tanto Estados Unidos como la propia organización, «nadie puede ganar». «Rusia sabe que no se puede ganar una guerra nuclear y que no se puede librar», ha afirmado el secretario general.
Stoltenberg ha señalado que las insinuaciones rusas acerca de utilizar el arsenal nuclear son «peligrosas e irresponsables», pero que «ahora es el momento oportuno de ser firme y claro sobre que la OTAN está ahí para proteger y defender a sus aliados».
En cualquier caso, el secretario general no percibe un cambio de postura que pueda desencadenar a corto plazo un ataque nuclear, «pero seguimos atentos», si bien ha reiterado que habrá «consecuencias severas» en caso de que llegue el caso.
En el ejercicio, denominado «Steadfast Noon», participarán 14 países de la Alianza con diversas aeronaves de los distintos países y no cuenta con artillería real.
Finlandia aconseja almacenar pastillas de yodo
Por su parte, el Gobierno de Finlandia, país que comparte frontera con Rusia, ha actualizado sus recomendaciones para la población general en caso de radiación nuclear, de tal manera que aconseja almacenar pastillas de yodo a los hogares que tengan entre sus miembros a personas de entre cuatro y 40 años y a mujeres embarazadas.
El Ministerio de Asuntos Sociales y Sanidad finlandés ha publicado este martes unas nuevas directrices con las que revisa las emitidas hace ya 20 años. Ahora, el yodo medicinal ya no se recomienda en el caso de adultos con más de 40 años de edad, por entender que no tienen tanto riesgo de desarrollar un cáncer de tiroides en caso de una exposición a la radiación.
El consejo principal de las autoridades sigue siendo refugiarse en espacios interior, «porque es la manera más efectiva de reducir la exposición a la radiación». La ingesta de pastillas de yodo sería «una precaución secundaria complementaria», reza el texto difundido por el Ministerio.
Los protocolos no aluden a ninguna amenaza específica y el director de la agencia que regula la seguridad nuclear (STUK), Petteri Tiippana, ha aclarado que no hay ningún riesgo inminente derivado ni de las centrales nucleares finlandesas ni de los países vecinos, en alusión también a Ucrania, según la cadena YLE.