Piden a la Policía belga vetar un acto al que iba Orbán: «La extrema derecha no es bienvenida»
La reunión, llamada Conferencia Nacional del Conservadurismo (NatCon), iba a tener lugar en un municipio de Bruselas
Las autoridades belgas han mandado clausurar un evento donde tenían previsto intervenir líderes del espectro conservador como el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, el candidato ultraderechista francés, Eric Zemmour o la exministra de Interior británica, Suella Braverman, entre otros. El alcalde del municipio Saint-Josse-ten-Noode, donde era el acto, ha asegurado al respecto que «la extrema derecha no es bienvenida».
La reunión, conocida con el nombre de Conferencia Nacional del Conservadurismo (NatCon), iba a tener lugar en esta localidad de Bruselas esta semana. Sin embargo, mientras el fundador del partido Brexit, Nigel Farage, hablaba con seguidores en el Claridge de la capital del país, las autoridades han intervenido de manera inesperada para clausurar el evento en torno a las 12.30 del martes, según ha informado Euronews.
Un reportero del mencionado medio se encontraba en el lugar de los hechos cuando la Policía apareció de manera inesperada en el lugar de reunión para paralizar el encuentro alegando que «las autoridades» habían decidido «clausurar el acto». El agente encargado de dar la noticia aseguró que llevaba con él un documento de unas tres páginas de extensión en el que se explicaba la decisión de las autoridades de ordenar el cese de la actividad, a petición del alcalde del municipio, perteneciente a la región de Bruselas-Capital.
Declaraciones del alcalde
El alcalde de la localidad, Emir Kir, ha lanzado un rotundo mensaje a través de la plataforma X sobre la reunión asegurando que solicitaba la paralización inmediata del evento para «garantizar la seguridad pública». «En Etterbeek, Bruselas y Saint-Josse, la extrema derecha no es bienvenida», ha añadido en en tuit publicado en su cuenta oficial a las 12.15 de la mañana del martes.
El lugar de encuentro
La elección del lugar de encuentro de los participantes en Bruselas no fue tarea fácil. Varias sedes de la ciudad de Bruselas rechazaron cualquier tipo de acuerdo por negarse a ceder el espacio a un evento de esas características.
Finalmente, y tras varios intentos fallidos, la reunión tendría lugar en el hotel Sofitel, ubicado en el barrio de Etterbeek. Sin embargo, al enterarse el alcalde del barrio del tipo de conferencia que iba a llevarse acabo, ordenó romper el contrato.
Farage: «Es absolutamente indignante»
Nigel Farage ha sido muy crítico con la decisión de los locales de no ceder el espacio, calificándola de «absolutamente indignante». Al evento se preveía que asistieran en torno a unas 600 personas.
Su cancelación se ha producido a menos de dos meses de las elecciones europeas, en la que múltiples encuestas pronostican un aumento considerable del apoyo a los partidos de ultraderecha.