Las cinco «reglas de oro» para perder peso, según un reputado entrenador
Cuando queremos adelgazar caemos en errores básicos, por eso es importante escuchar a los que más saben del tema
Si nos preocupa nuestra salud sexual, acudimos al ginecólogo o al urólogo; si nos atormenta nuestra espalda, vamos al fisioterapeuta; y si queremos perder peso, lo mismo. Cuando queremos conseguir una meta específica, lo mejor es hacer caso a los que más saben, a los que están especializados en ello, y por eso hoy, que vamos a tratar sobre cómo adelgazar, vamos a fijarnos en las premisas que ha dado un reputado culturista.
Él es Joe Delaney, un entrenador personal y atleta profesional, afincado en Reino Unido, que es famoso en todo el mundo por su canal de YouTube, en el que acumula más de medio millón de suscriptores. En uno de estos vídeos, titulado Las cinco reglas de oro para perder peso, Delaney analiza qué pasos debemos dar para conseguir nuestro objetivo. Son las siguientes:
Mide tus señales de hambre
Hace poco te contábamos en THE OBJECTIVE que mucha gente confunde aburrimiento, estrés o ansiedad con hambre, lo que le lleva a comer de más y, normalmente, alimentos nada sanos. Por eso, una de las claves para estar en forma y sano –y perder peso, si se quiere– es, sin duda, saber distinguir cuándo uno tiene hambre y cuándo no.
Parece un tema baladí, pero en el primer mundo estamos sobrealimentados y rara vez hemos experimentado esa sensación de necesitar comida de inmediato. Por eso es tan importante ayunar de vez en cuando, porque uno se conoce a sí mismo, además de otros beneficios.
Una vez que tengas hambre, y que aprendas a distinguir esa sensación, Delaney recomienda no permanecer hambriento mucho tiempo, ya que «nuestra fuera de voluntad no puede competir con ella». «Lo mejor es consumir alimentos con pocas calorías, saciantes, mantenernos hidratados o cronometrar el ejercicio de manera efectiva», asegura.
Ir a tu ritmo
«Relájate un poco. Si estableces tus calorías demasiado bajas porque estás tratando de perder peso rápidamente, lo conseguirás, pero entrarás lo recuperarás igual de rápido y entrarás en un ciclo de atracón-hambre», afirma el experto, que recomienda calcular, aproximadamente, cuánto peso se debe perder a la semana y utilizar esta cifra como objetivo para ir poco a poco.
Tienes que ser consciente que para bajar este peso debes tener un déficit de 7.000 calorías, o sea tendrás que comer menos o diferente.
Seguimiento de su progreso
«Llegará un punto en el que será útil –si no muy, muy necesario– comenzar a realizar un seguimiento. Lo principal será el peso corporal y la ingesta de calorías», asegura.
Además de controlar lo que comes, sin obsesionarte, debes fijarte en los horarios que llevas. Si quieres perder peso, lo mejor es que cenes sobre las 20 horas como tarde. Esta cena debe contener alimentos ricos en proteínas con triptófano, ya que se convierte en melatonina cuando es procesado por el cuerpo, lo que te ayudará a dormir bien. ¿Ejemplos? La carne blanca, el pescado y los huevos.
Consistencia, esencial para perder peso
No abandonar un plan de adelgazamiento es quizá lo más difícil, ya que los humanos siempre tendemos a buscar excusas para volver a nuestra zona de confort y dejar de esforzarnos. «A veces, todo lo que necesitas hacer es continuar. Y no obsesionarte si no pierdes peso en una semana», apunta Delaney.
Debes tener en cuenta que, normalmente, se adelgaza mucho en el primer mes y medio del plan, y luego el cuerpo comienza a tirar de las reservas de grasa para funcionar. Esto ocasiona que pérdida de peso sea más lenta, y es aquí cuando la mayoría suele tirar la toalla.
Pasado este mes y medio, además, es posible que se alcance una meseta en la pérdida de peso, como resultad de la ralentización del metabolismo. Esto suele ocurrir a los que siguen regímenes demasiado estrictos y bajos en calorías, por eso es importante alimentarse de forma correcta y no pasar hambre.
No te aburras
Muchos se aburren de sus comidas cuando están tratando de perder peso. Que si ensalada, puré, verduras, pollo hervido, pescado a la plancha… al final, resulta pesado. Por eso es importante que no caigamos en la rutina y que innovemos en la cocina, ya que así tendremos menos probabilidades de abandonar.