Ropa interior masculina: así han cambiado los gustos del hombre en las últimas décadas

¿Es tu ropa interior igual a la que usaban tu padre o tu abuelo? Seguramente pienses que, aún con adaptaciones a los nuevos tiempos, los calzoncillos tampoco han evolucionado mucho a lo largo de los últimos años. Somos conscientes de que la lencería de mujer sí cuenta con tendencias y distintas propuestas cada temporada, pero las prendas íntimas masculinas no parecen que sean tan influenciables por las modas.

Aunque este sea el pensamiento más general, es totalmente erróneo. La ropa interior masculina ha cambiado muchísimo en las últimas décadas. Algunos cambios son bastante discretos, ya que son el resultado de investigar sobre nuevos tipos de tejidos o costuras, así que son más perceptibles al tacto que a la vista. La realidad es que las firmas especializadas en este sector no dejan de innovar con un único propósito: conseguir diseños cada vez más cómodos para el hombre.

Aunque siempre permanece oculta, hoy en THE OBJECTIVE vamos a sacar a la luz a la ropa interior del hombre para ver su evolución desde mediados del siglo XX hasta nuestros días. Para ello, contamos con la experiencia de firmas históricas con décadas de historia y que, para muchos, forman parte de la familia. ¿Cuáles han sido los cambios más significativos de la historia más reciente de los calzoncillos? ¿Qué podemos esperar de ellos en los próximos años? Descubre mucho más sobre esta prenda íntima que te acompaña cada día.

Los antecedentes del calzoncillo actual

Desde la hoja de parra de Adán a los taparrabos trogloditas, el hombre siempre ha utilizado algún tipo de ropa interior. Los antecedentes del calzoncillo como hoy lo conocemos no lo encontramos hasta el siglo XIX. En esta época, los hombres vestían bajo su ropa de calle unos monos largos cuya finalidad era proteger del frío y enmascarar los posibles olores corporales. El tejido más común para estos primeros calzoncillos masculinos era la lana.

Fue un poco más adelante cuando la ropa interior masculina se adapta a las temperaturas veraniegas. Tanto las perneras como las mangas se recortan para, finalmente, separarse en dos partes y dar vida a lo que hoy conocemos como camiseta interior y calzoncillo bóxer. En los primeros años del siglo XX se populariza mucho el uso de la ropa interior apoyada fundamentalmente por el apogeo de la publicidad que se vive a lo largo de los años 20.

Esta época dorada de la ropa interior se ve truncada con el crack del 29. Es momento de ahorrar y eso también tiene sus consecuencias en la ropa interior. Con la necesidad de reducir costes se recorta en tejido eliminando completamente las perneras de los calzoncillos y surgiendo los primeros slips. Sí, una crisis económica es la responsable del nacimiento de esta prenda.

La Segunda Guerra Mundial volvió a causar un gran impacto, tanto en los diseños como en los materiales utilizados para la confección ya que se tuvo que adaptar a la escasez de tejidos. Una nueva demostración de que la evolución de la ropa interior está muy influenciada con los cambios sociales y económicos vividos durante su historia.

¿Bóxer o slip?

Dentro de la ropa interior masculina existe una eterna batalla entre los dos modelos más utilizados entre los hombres. El dilema sobre escoger slip o bóxer es uno de los temas clásicos en cualquier conversación sobre este tipo de prendas. Se trata de una decisión personal que cada hombre toma en base a su comodidad y estilo de vida. «Si miramos datos de venta, el bóxer es sin duda el ganador, pero no podemos olvidarnos del slip que también tiene sus incondicionales», aseguran desde la firma Abanderado.

La marca de ropa interior nos asegura que existe un importante grupo de hombres que usa de manera indistinta ambos patrones, eligiendo uno u otro en función de la actividad que vayan a realizar. Por ejemplo, los slips son muy utilizados para hacer deporte ya que aportan una mayor sujeción. «A la hora de comprar ropa interior masculina, lo importante es que nos proporcione libertad de movimiento», aclaran desde DIM.

Los tejidos favoritos

En la ropa interior masculina podemos encontrar actualmente gran variedad de tejidos, tanto naturales como sintéticos. Así la oferta disponible abarca materiales como el algodón, poliéster, microfibra, bambú o tencel. Entre todos ellos, el gran favorito sigue siendo el algodón. «Una de sus grandes ventajas es su gran capacidad de absorción de la humedad, además es un material ligero y muy duradero», informa Laura Isabel Rodríguez, Brand Manager de Abanderado.

El algodón sigue siendo el textil estrella porque es el más demandado por los clientes así que es el más empleado en la confección de ropa interior. «Es recomendable siempre mirar la composición de la prenda que adquirimos para asegurarnos de que el algodón tiene un porcentaje mayoritario en su fabricación», recomiendan desde DIM. En esta firma se está apostando últimamente por el algodón Cotton Stretch. Esta decisión se debe a tres de sus principales características: es elástico, transpirable y de tacto extrasuave.

En la actualidad, la industria textil está intentando ser cada vez más sostenible y el sector de la ropa interior no es ajeno a este movimiento. Por ejemplo, Abanderado está centrando sus desarrollos en conseguir esta sostenibilidad con gamas de producto fabricadas con algodón orgánico certificado. En la producción de este tipo de algodón no se usan sustancias toxicas, se hace un uso más eficiente del agua y se apoya el bienestar de muchas familias que se dedican al cultivo.

Otra de las últimas opciones más eco que están teniendo mucho éxito entre los hombres son nuevas fibras naturales como el bambú. Se trata de un material natural que se extrae de los tallos del bambú dando como resultado un tejido que es hipoalergénico, controla la temperatura corporal, es extremadamente suave y no se arruga.   

¿Lisos o estampados?

Una de las mejores maneras de ver cómo ha ido evolucionando la ropa interior masculina de los últimos años es ver cómo han cambiado los gustos en cuanto a los colores y estampados que más se demandan. En este aspecto, parece que los hombres son más clásicos de lo que parece a la hora de elegir los colores de sus calzoncillos. «Los colores básicos, como el blanco, el negro y toda la gama de azules, siguen siendo los más vendidos», confirman desde Abanderado.

Aunque ahora se pueden encontrar prendas íntimas en una amplia variedad de colorido, son los consumidores más jóvenes los que se decantan por colores más atrevidos como el naranja, el verde, el amarillo o el morado.

Esta diferencia entre las generaciones también se deja ver en los estampados. Los hombres más maduros prefieren dibujos pequeños y discretos, mientras que entre los más jóvenes las preferencias son hacia los prints más grandes y atrevidos. Aún así, parece que los gustos actuales se decantan más por los diseños lisos. «El top ventas siguen siendo los calzoncillos lisos y de tonos oscuros como azul, verde, grises o blancos», aseguran desde DIM.

No será por falta de opciones. En DIM, por ejemplo, existen modelos de calzoncillos que se pueden encontrar hasta en 13 versiones distintas para elegir con diferentes colores, dibujos y estampados. «Normalmente los tonos claros o neutros son una apuesta segura, pero no todos los hombres buscan lo mismo», nos cuentan desde la firma.

El futuro de la ropa interior

Las firmas especializadas nos confirman que el hombre actual destina más presupuesto a la compra de calzoncillos que en el pasado. Cada vez más chicos toman la iniciativa a la hora de comprar su ropa interior. Ya no solo lo hacen para el día a día como producto de primera necesidad, sino que de vez en cuando compran por capricho o para alguna ocasión especial. El hombre del siglo XXI se cuida por fuera y por dentro y comienza a valorar la estética en su ropa interior.

Hemos visto como la ropa interior ha ido evolucionando con los años y los cambios sociales y esta evolución seguirá produciéndose en los próximos años. «Veremos novedades en cuanto a tejidos, cada vez más sostenibles y con características que mejoren la calidad y la comodidad», confirman desde Abanderado. Esta firma es un testigo claro de los cambios en estas prendas ya que este año celebra su 60 cumpleaños.

Otras de las novedades que nos esperan en el futuro es la evolución en los patrones. Se espera que en los próximos años los bóxers sean más largos y los slips más anchos. Además se confirma la tendencia de los productos sin costura para que pasen completamente invisibles debajo de los pantalones. En cuanto a colores, el pantonario es muy amplio y veremos combinaciones de color que seguirán las tendencias que puedan verse en las principales pasarelas de moda.

Dentro de las próximas innovaciones en el sector textil, para DIM destacan los calzoncillos confeccionados con fibra termoreguladora. Su capacidad de mantener la temperatura corporal los hace perfectos para realizar deporte. Además, se seguirá apostando por modelos realizados con algodones elásticos para conseguir una ropa interior ultrasuave.

Y tú, ¿sigues usando el mismo estilo de ropa interior que hace unos años?