Harvard revela el superalimento de la dieta mediterránea que alarga la vida
Según estudios recientes sobre longevidad, existe un alimento de la dieta mediterránea que destaca entre los demás
No es la primera vez que los expertos de la universidad de Harvard resaltan la dieta mediterránea. De hecho, existen numerosas investigaciones que señalan que, cuando se sigue de manera adecuada, tiene excelentes propiedades para la salud.
La razón por la que sitúan esta dieta como una de las mejores es, precisamente, el impacto positivo que tienen los alimentos que la forman en la salud cardiovascular, la función digestiva y la defensa contra afecciones relacionadas con la inflamación.
De nuevo, un exhaustivo estudio desarrollado por Harvard y publicado en el Journal of the American College of Cardiology, basado en información de más de 90.000 ciudadanos estadounidenses durante casi tres décadas, ha concluido de manera contundente que uno de los alimentos que componen la dieta mediterránea disminuye significativamente la posibilidad de fallecimiento prematuro.
¿De qué alimento se trata?
El estudio se ha llevado a cabo en una zona geográfica distinta a la región mediterránea. Los investigadores resaltan que aquellos individuos que incorporan en su dieta una cantidad significativamente mayor de este componente (superior a siete gramos diarios) presentan un descenso del 19% en el riesgo de fallecer a causa de enfermedades cardiovasculares.
Además, se han identificado reducciones en los riesgos asociados a afecciones respiratorias, cáncer y enfermedades neurodegenerativas.
El protagonista de este estudio es el aceite de oliva. Específicamente, en su variante virgen, obtenido mediante procedimientos mecánicos sin el uso de disolventes químicos. Este aceite no solo contiene un elevado porcentaje de ácido oleico beneficioso para la salud, sino también cantidades significativas de vitamina E y polifenoles.
Incluso dentro del grupo de individuos que reemplazan la mantequilla, la margarina o la mayonesa por aceite de oliva, se aprecia una notable disminución del 34% en el riesgo de fallecimiento prematuro.
Importancia de la calidad del aceite
Según la revista cuerpomente, una investigación adicional, publicada este año en el European Journal of Clinical Nutrition, pone de manifiesto que los beneficios preventivos contra la mortalidad prematura están asociados exclusivamente al consumo de aceite de oliva virgen, y no al aceite refinado.
Beneficios del aceite de oliva
El aceite de oliva es ampliamente reconocido por sus numerosos beneficios para la salud. Algunos de estos beneficios incluyen:
- Salud cardiovascular: el aceite de oliva virgen extra, en particular, es rico en grasas monoinsaturadas, como el ácido oleico, que pueden ayudar a reducir el colesterol LDL («malo») y mantener la salud del corazón. También puede contribuir a la reducción de la presión arterial y la inflamación.
- Antioxidantes: el aceite de oliva contiene antioxidantes naturales, como la vitamina E y los polifenoles, que ayudan a proteger las células del daño causado por los radicales libres y, por lo tanto, pueden tener efectos anticancerígenos y antienvejecimiento.
- Salud cerebral: algunos estudios sugieren que el consumo regular de aceite de oliva podría estar relacionado con una reducción del riesgo de enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer y el Parkinson, debido a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
- Salud digestiva: el aceite de oliva puede ayudar a mejorar la digestión y prevenir problemas gastrointestinales, al promover una digestión saludable y estimular la producción de bilis.
- Control del peso: aunque es una fuente de calorías, el aceite de oliva puede ayudar en el control del peso debido a su capacidad para mejorar la saciedad y reducir el apetito, lo que puede conducir a una ingesta calórica moderada.
- Salud ósea: algunas investigaciones sugieren que el aceite de oliva virgen extra podría tener un efecto positivo en la densidad ósea y la prevención de la osteoporosis, posiblemente debido a sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes.
- Salud de la piel: los antioxidantes presentes en el aceite de oliva pueden contribuir a una piel más saludable, protegiéndola contra el daño causado por los radicales libres y ayudando a mantener su hidratación.
- Regulación del azúcar en sangre: el consumo de aceite de oliva puede ayudar a mejorar la sensibilidad a la insulina y controlar los niveles de azúcar en sangre, lo que es beneficioso para las personas con diabetes tipo 2.