Esta es la vitamina que ayuda a reducir el cansancio tanto físico como mental
La deficiencia nutricional, es un factor clave en el estado de fatiga persistente y, a menudo, pasa desapercibida
El cansancio se ha convertido en un estado cada vez más frecuente en personas de todas las edades y estilos de vida. El estado de fatiga y agotamiento permanente, tanto físico como mental, está teniendo un impacto significativo en las actividades diarias de quien lo sufre.
Desde la productividad laboral hasta las interacciones sociales y el bienestar general, el cansancio está influyendo profundamente en la forma en que vivimos y funcionamos en nuestra vida diaria.
¿Cuáles son los motivos que contribuyen al estado de fatiga persistente?
Las razones detrás de este agotamiento generalizado son muy diversas. La rutina desenfrenada que caracteriza el día a día de las personas contribuye en gran medida a este estado de fatiga persistente.
Pero también, las largas jornadas laborales, el estrés continuo, la constante conexión digital, el intento de conciliar el trabajo con la vida personal y la falta de descanso son algunos de los factores que influyen en el agotamiento.
Sin embargo, hay un factor clave en la sensación de cansancio que a menudo pasa desapercibido. Se trata de la deficiencia nutricional.
A pesar de la variedad de alimentos y la disponibilidad de información sobre nutrición, un número considerable de personas enfrenta deficiencias de vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales por no tener una dieta adecuada.
Los estilos de vida modernos, a menudo caracterizados por dietas desequilibradas, elecciones rápidas y procesadas, así como restricciones dietéticas autoimpuestas, contribuyen a estas deficiencias nutricionales.
Por ejemplo, la deficiencia de hierro puede conducir a la anemia, causando fatiga y debilidad generalizada. Asimismo, la falta de vitamina D, vitaminas del complejo B o minerales como el magnesio puede influir en los niveles de energía y tener efectos negativos en la salud física y mental.
El importante papel de la vitamina B12
La vitamina B12, también conocida como cobalamina, es una vitamina fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo humano. Es esencial para varios procesos biológicos clave, incluyendo la formación de glóbulos rojos, la salud del sistema nervioso y la síntesis de ADN.
Además, esta vitamina desempeña un papel fundamental en la producción de energía, ya que está involucrada en el metabolismo de los ácidos grasos y los aminoácidos.
Una de las características únicas de la vitamina B12 es que el cuerpo humano no puede producirla por sí mismo, por lo que debemos obtenerla a través de alimentos específicos como productos de origen animal (carne, pescado, huevos y lácteos) o suplementos alimenticios.
La deficiencia de vitamina B12 es más común de lo que se piensa y puede tener consecuencias significativas para la salud. Los síntomas de deficiencia de B12 incluyen fatiga, debilidad, anemia, entumecimiento o sensación de hormigueo en las extremidades, problemas de memoria y dificultades cognitivas, entre otros.
Además, es muy importante para la salud mental. Su deficiencia está relacionada con la aparición de síntomas neuropsiquiátricos, como depresión, confusión, deterioro cognitivo, cambios de humor, y en algunos casos, problemas más graves como la demencia.
Esta vitamina es importante para la síntesis de neurotransmisores clave, como la serotonina y la dopamina, que están involucrados en regular el estado de ánimo y el bienestar emocional. Por lo tanto, mantener niveles adecuados de vitamina B12 es fundamental para preservar la salud mental y cognitiva.
¿Qué personas corren el riesgo de tener déficit de esta vitamina?
Las personas en riesgo de deficiencia de vitamina B12 incluyen a veganos que no consumen fuentes animales, personas con enfermedades que afectan a la absorción de nutrientes como SIBO o aquellos que han pasado por cirugías gástricas que pueden alterar la absorción de la B12.
Dado su importante papel en múltiples funciones del cuerpo y su impacto en la energía y la vitalidad, es fundamental asegurarse de mantener niveles adecuados de vitamina B12 a través de una dieta equilibrada o, en caso necesario, mediante suplementos recomendados por profesionales de la salud.
¿Qué alimentos aportan B12?
Productos de origen animal como carne roja (especialmente el hígado de vaca), aves de corral, pescados como el salmón, la trucha, el atún y las sardinas, así como los productos lácteos como la leche, el queso y los huevos.
Es importante destacar que la vitamina B12 no se encuentra en alimentos de origen vegetal, por lo que las personas que siguen una dieta vegana deben considerar suplementos o alimentos fortificados con vitamina B12 para prevenir deficiencias.
El hígado de vaca no solo es una excelente fuente de vitamina B12, sino que también aporta una cantidad significativa de hierro, otro nutriente esencial para prevenir la anemia, una afección que también puede generar fatiga y cansancio.
Si el sabor del hígado no es de tu agrado, existen otras fuentes de vitamina B12 que puedes incorporar en tu dieta para mantener unos niveles adecuados. Algunos alimentos marinos como las almejas y las sardinas son excelentes fuentes de B12.
Además, la yema de huevo concentra una cantidad considerable de vitamina B12. Algunos tipos de queso como el queso burgos, queso de bola, queso manchego, queso de cabra y requesón también contienen cantidades significativas de esta vitamina, brindando opciones variadas para satisfacer las preferencias alimentarias.