Dieta portfolio: qué es y cómo promete bajar el colesterol 'malo'
A través del reemplazo de ciertos alimentos, nuestro corazón puede aplaudir la decisión
De todos los motivos que hay para hacer dieta entre los más habituales solemos citar el hecho de querer perder peso o de corregir ciertos parámetros de nuestras analíticas. En la dieta portfolio, diseñada hace más de dos décadas por el doctor David Jenkins, que, entre otras cosas, es también el inventor del concepto del índice glucémico, el enemigo es el colesterol.
Convertido en uno de los grandes caballos de batalla de la alimentación occidental, los niveles de colesterol alto se asocian a mayores riesgos cardiovasculares. Con ellos también a patologías asociadas como la obesidad o sobrepeso. La cuestión no es comprobar si cuando hablamos de niveles altos del colesterol son relaciones casuales o causales. Lo evidente es que al final siempre acaban en la misma ecuación.
Por eso, la dieta portfolio, que no es una dieta especialmente restrictiva, apunta a cómo reducir los niveles de colesterol de forma relativamente sencilla. En este caso, lo principal para entender la dieta portfolio es comprender que está enfocada añadir determinados alimentos en la dieta que reduzcan el colesterol.
Cómo funciona una dieta portfolio
La esencia de la dieta portfolio es muy básica. En teoría, solo se resumiría en incluir en ella los alimentos que reduzcan el colesterol. En los cuatros ejemplos que más se citan hablamos de proteínas de soja, esteroles vegetales, frutos secos y fibra soluble. Todos ellos, en mayor o menor medida, han demostrado reducir de manera significativa los niveles de colesterol. Por ende, también cumplen con una función cardioprotectora.
Por ejemplo, una de las principales motivos o razones que da la dieta portfolio en la sustitución proteica. En este caso, aboga por consumir proteínas de soja (como el tempeh o el tofu) en vez de proteínas lácteas o cárnicas. Evidentemente, no todas las proteínas de la carne son iguales. Ni todos los lácteos son iguales. No obstante, hablamos de una regla más o menos genérica. No obstante, tengamos el matiz claro de las proteínas de alto y bajo valor biológico, que hemos explicado antes en THE OBJECTIVE.
Además, debemos ser conscientes de que no deberíamos consumir más de dos raciones de carne roja por semana y que tampoco los procesados de carne deban tomarse más de una vez. Esta recomendación también es algo sobre lo que la organización mundial de la salud ha hablado en varias ocasiones.
En cierto modo, la dieta portfolio no es excesivamente restrictiva más allá de determinados alimentos que, de serie, no deberíamos consumir a menudo. Lo que se suele citar entre los alimentos a evitar están los procesados, así como los carbohidratos refinados —incluyendo reposterías—, el azúcar o las bebidas azucaradas.
Qué incluir en ella
Por contra, en lo que se hace hincapié, es en tener una alimentación lo más vegetal posible. Frutas, verduras, frutos secos, semillas, cereales integrales, además de legumbres, la citada proteína de soja y grasas lo más saludables e insaturadas posibles. En este ejemplo es donde entran ciertas grasas vegetales que puedan estar enriquecidos con esteroles vegetales.
Lo que también es evidente es que una dieta portfolio solo debe ser pautada por un profesional médico y por un nutricionista que nos aconsejen la reducción de los niveles de colesterol. No es algo que debamos hacer por nuestra cuenta. Ni algo en lo que simplemente nos debamos fiar del consejo de un amigo o de un ser cercano. Como en toda dieta, lo principal es estar supervisado por un profesional.
¿Funciona la dieta portfolio?
En esencia, todos los alimentos o recomendaciones que se explican en este tipo de dietas, cumplen con el parámetro de bajar el colesterol. Sucede tanto con los esteroles vegetales como con la fibra soluble. De hecho, esta última ha demostrado en varios estudios que reduce los niveles totales de colesterol y del colesterol malo (el LDL), ya que se estima que absorbe el colesterol del torrente sanguíneo. Algo que también se ha comprobado en numerosos estudios sobre los frutos secos o sobre la soja.
No obstante, la dieta portfolio deja siempre bien claro cuando es pautada que no está enfocada a otros menesteres. Si nuestra intención es perder peso o cambiar otras analíticas, no es nuestro camino. Además, como permite una gran cantidad de alimentos (dentro de un límite). Algo que, para ciertas personas, puede ser difícil mantener la adherencia, lo cual también puede ser a veces la ventaja de este tipo de dietas.
Como es lógico, cualquier tipo de dieta está inmersa en un círculo virtuoso. Si hacemos deporte, mantenemos niveles bajos de estrés, tenemos una buena higiene del sueño y unas buenas relaciones sociales, también redundarán a nivel general en nuestro estado físico.