Cinco trucos para que el café o el té no manchen tus dientes
Aunque son bebidas saludables su consumo frecuente puede acabar apagando el blanco de tus dientes
Sonrisa con dientes blancos | Unsplash
Nada es completamente perfecto. A pesar de que el café y el té son bebidas saludables en general, su consumo regular puede causar decoloración en tus dientes. Sin embargo, no es necesario renunciar a estas bebidas, ya que siguiendo estos cinco consejos según Clínica Cervera se puede evitar o reducir al mínimo las manchas en tus dientes.
Disfrutar de una taza de té o café se ha convertido en un ritual para muchos. Aunque estas bebidas son beneficiosas para la mayoría de las personas y son parte la rutina diaria, consumirlas con frecuencia o en exceso puede tener un impacto estético negativo, manifestándose en la coloración de nuestros dientes.
¿Por qué se producen estas manchas en los dientes?
Estas alteraciones en el color o decoloraciones en la capa superficial del esmalte dental. Principalmente afectan a la apariencia estética de la boca, y en ciertos casos, podrían señalar deficiencias en la higiene oral. No obstante, las razones detrás de estas manchas no son exclusivamente relacionadas con la higiene, ya que pueden surgir por diversas causas.
Las manchas en los dientes son causadas por colorantes, ya sean naturales o artificiales, que se encuentran en muchos alimentos explican los expertos de Clínica Cervera. Estos colorantes tienen la tendencia de manchar el esmalte dental. Aunque no sea visible a simple vista, el esmalte tiene pequeños huecos microscópicos por los cuales estos colorantes penetran y se acumulan, provocando la decoloración.
Estos son los consejos para evitar manchar los dientes al beber café o té
1. Enjuagarse la boca con agua tras tomar estas bebidas
Esto ayudará a arrastrar gran parte de los restos que puedan depositarse en los dientes, además de neutralizar la acidez de estas bebidas. Si no puedes enjuagarte la boca, una alternativa es simplemente beber agua, lo que también te ayudará a mantener la boca hidratada. Esto último es muy beneficioso, sobre todo si se toma el café o el té con cafeína o teína, respectivamente, ya que resecan la boca.
2. No cepillarse los dientes justo después de beber café o té
Lo más importante para que los dientes no se amarilleen es cepillarlos. La principal causa de las manchas es la acumulación de restos de comida y, por tanto, de placa bacteriana, por lo que una correcta higiene oral es fundamental para prevenir la tinción del esmalte.
Sin embargo, no se debe cepillar justo después de beber café o té ya que, al ser bebidas ácidas, debilitan el esmalte. Al estar tan frágil, un cepillado puede desgastarlo. Es preferible esperar al menos 30 minutos, sin olvidar el hilo dental y el enjuague (en caso de que te lo haya indicado tu dentista).
3. Evita retener demasiado el líquido en la boca
Al tomar estas bebidas en el día a día se quiere paladear bien su sabor, pero cuanto menos tiempo se retenga en la boca, mejor. Aunque tradicionalmente los dentistas recomendaban usar una cañita o pajita para reducir el contacto del líquido con los dientes, este utensilio causa un gran impacto negativo en el medio ambiente, por lo que es preferible desaconsejar o bien utilizar pajitas reutilizables o biodegradables.
4. Mejor, sin azúcar
Aparte de las consecuencias negativas que el azúcar tiene para la salud en general, también contribuye a la formación de caries, y con ellas, de manchas en el esmalte. Desde Clínica Cervera recomiendan, por tanto, que se elija el sabor natural del café o el té.
5. Comer alimentos crujientes o mastica chicle sin azúcar
En caso de que no puedas cepillarte los dientes después de consumir café o té, tomar alimentos con fibra, como manzanas, peras, zanahorias o apio, o masticar chicle sin azúcar pueden ayudar a corregir la acidez de la boca y arrastrar parte de las partículas del café o té que se hayan pegado al esmalte.
