¿Qué beneficios tiene el jamón ibérico para la salud?
Consumir este alimento con moderación, no es solo saludable, sino muy recomendable para una dieta equilibrada
El jamón ibérico es un tesoro culinario de España. A pesar de tener muchos admiradores, a veces se propagan falsas creencias sobre su consumo.
Es importante destacar que consumirlo con moderación, sea de la categoría que sea, es no solo saludable, sino muy recomendable. Sin embargo, los jamones de las categorías más altas, marcadas con precintos rojos y negros, son aún más beneficiosos.
Estos provienen de cerdos cuyos padres son 100% ibéricos en el caso del precinto negro, y 50% en el caso del rojo, y han disfrutado de una alimentación rica en bellotas, hierbas y recursos naturales en la dehesa durante su engorde.
¿Por qué deberíamos consumir jamón ibérico de bellota?
El jamón ibérico de bellota es una fuente nutritiva excelente, repleta de proteínas, vitaminas y aminoácidos esenciales de primera calidad, lo que lo convierte en una opción saludable cuando se consume con moderación.
Desde Julián Martín, una empresa familiar de Salamanca especializada en jamones y embutidos ibéricos, afirman que estos son los beneficios que este alimento puede ofrecer para la salud:
Ácido oleico
El ácido oleico es un aliado para la salud del corazón, y es una de las razones más destacadas por los productores de jamón ibérico.
Esto se debe a que la grasa de los cerdos ibéricos, alimentados con bellotas, contiene un alto porcentaje de este ácido (entre el 55% y el 65%).
El ácido oleico, presente también en el aceite de oliva, fortalece y mejora el revestimiento de las arterias, reduciendo así el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Vitaminas del complejo B
Estas vitaminas son fundamentales para la salud del cerebro y del sistema nervioso. Proporciona vitaminas B1, B6 y B12, las cuales son esenciales para el desarrollo cerebral, el mantenimiento del sistema nervioso y la función inmunitaria.
La deficiencia de estas vitaminas puede provocar fatiga, pérdida de apetito y estrés, mientras que la vitamina B12 previene la anemia y la B6 mejora la circulación.
Fuente de minerales
El jamón ibérico también es una fuente de minerales, como el hierro hemo y el sodio. El hierro hemo, presente en productos animales como la carne y el pescado, se absorbe mejor que el hierro de origen vegetal.
Ayuda a transportar oxígeno por todo el cuerpo, especialmente a los pulmones y los músculos. La falta de hierro hemo puede causar fatiga y debilitamiento muscular.
Grasas monoinsaturadas
Las grasas monoinsaturadas son una excelente opción para controlar el colesterol. No todas las calorías ni todas las grasas son perjudiciales.
A menudo se juzga la salud de un producto según las calorías que aporta, pero esto es una simplificación incorrecta de la nutrición.
Las grasas monoinsaturadas, presentes en alimentos como nueces, aguacates y aceites vegetales, son beneficiosas ya que proporcionan energía, calor y fortalecen el sistema inmunológico.
En el caso del jamón, ayuda a reducir los niveles de colesterol LDL, conocido como colesterol malo, y aumenta los niveles de colesterol HDL, el colesterol bueno, lo que disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares.
Una porción de 100 gramos de jamón ibérico de bellota aporta alrededor de 250 calorías, lo que lo hace adecuado para ser parte de una dieta mediterránea equilibrada cuando se consume con moderación.
En cuanto a su contenido de ácidos grasos, aproximadamente entre el 15% y el 20% del peso total del jamón son grasas insaturadas, mientras que solo 8-9 gramos de cada 100 gramos de producto son grasas saturadas.
Ayudan al desarrollo muscular
Las proteínas del jamón ibérico de bellota no solo son excelentes para el desarrollo muscular, sino que también actúan como antioxidantes y contribuyen al bienestar emocional.
Con 34 gramos de proteínas por cada 100 gramos de jamón, es una opción ideal para deportistas y para aquellos que buscan aumentar su masa muscular. Además, puede ser un sustituto saludable de carnes rojas con mayor contenido graso.