Las vitaminas que debes tomar si quieres tener el pelo sano y abundante (y evitar su caída)
Para tener un pelo sano es vital contar con una hidratación adecuada, así como con una alimentación equilibrada
La calidad del pelo depende mucho de la genética, pero también de los cuidados y la alimentación que sigamos. De hecho, cada vez son más los que se replantean cuál es la forma correcta de cuidar el cabello, ya no solo a nivel externo, sino también interno, porque que el pelo es un claro reflejo de la salud en general y, en numerosas ocasiones, es uno de los primeros signos de que algo no va bien.
Los expertos recuerdan que para tener un pelo sano es de vital importancia contar con una hidratación adecuada, así como con una alimentación equilibrada con la que se cubran los requerimientos de vitaminas y minerales, especialmente la biotina y el pantenol, que favorecerán el crecimiento del cabello junto con la correcta lubricación del mismo, lo que hará que se vea con un aspecto sano y luminoso.
Las vitaminas que debes tomar si quieres tener el pelo sano y abundante
Al respecto, la doctora María del Carmen Soto, de Hospital Capilar, asegura que hay diferentes vitaminas que podemos tomar para fortalecer la salud capilar:
- La vitamina A, ya que ayuda a mantener la lubricación del folículo piloso, eliminando la resequedad y los alimentos ricos en estas vitaminas son el hígado, los huevos, las verduras, la leche, el pescado, algunas frutas, aceites como el de girasol y el de oliva, así como alimentos fortificados con dicha vitamina.
- Vitaminas B3 (niacina) y B6 (piridoxina): ambas proporcionan fuerza, tonicidad y vitalidad al cabello y son muy importantes en la síntesis de la queratina, que es la responsable de dar brillo, sedosidad y volumen al pelo. Estas se encuentran también en el hígado y los huevos, así como en la coliflor, las legumbres, las judías verdes y los plátanos, entre otros.
- Vitamina C: es esencial en el metabolismo del hierro y que se encarga del crecimiento sano y fuerte del pelo. Esta vitamina se encuentra en alimentos como las espinacas o las frutas cítricas.
Más allá de las vitaminas
Además de estas vitaminas, es importante consumir otros micronutrientes como el magnesio, el ácido fólico y el omega 3, que están principalmente en los cereales y los frutos secos.
Otro de los alimentos recomendables para cuidar la salud capilar son las semillas de chía, que no solo aportan vitaminas, sino que también contienen minerales, antioxidantes, calcio y omega 3, entre otros.
Aceites esenciales imprescindibles para el pelo
En cuanto a los aceites esenciales, la doctora defiende que son buenos para la hidratación del pelo y que también mejoran su textura: «Se dejan actuar durante 30 minutos y, posteriormente, deben aclararse con agua tibia».
Entre aquellos que se pueden utilizar está:
- El aceite de coco, que ayuda a nutrir y fortalecer el cabello previniendo su rotura, además es antifúngico, por lo que evita infecciones, y ayuda a combatir la caspa.
- El aceite de ricino, que ayuda al crecimiento del cabello y tiene propiedades antiinflamatorias e hidratantes.
- El aceite de argán, que es excelente para nutrir el cabello y evitar su rotura.
- El aceite de oliva, que es especialmente bueno si el cabello está seco o dañado, ya que su función hidratante lo suaviza.
- El aceite de jojoba, que nutre y mantiene sano el cuero cabelludo, mejorando la textura del pelo.
Además, cabe destacar que estos cuidados desde dentro, como la alimentación o los aceites esenciales, funcionan igual para los hombres que para las mujeres.
Trucos importantes
Además de lo detallado, hay que saber cómo cuidar el cabello de una forma correcta desde dentro. «Lo primero que debemos tener en cuenta es que no es bueno lavar el pelo con tanta frecuencia, ya que el cuero cabelludo tiene una grasa natural que lo mantiene hidratado y, con el exceso de lavados, esto disminuye. También es bueno utilizar mascarillas u otros productos que no necesiten aclarado y que potencien la nutrición del cabello, así como secar el pelo con suavidad, cortar las puntas con regularidad y peinar el pelo cuidadosamente».
Asimismo, hay evitar abusar del secador de pelo o de productos químicos; el exceso de tabaco y alcohol; los peinados tirantes, las extensiones, dormir con el pelo mojado o el estrés, entre otros.