THE OBJECTIVE
Lifestyle

Estos son los alimentos que ayudan a mantener un pelo grueso y brillante

En otoño, el cabello tiende a debilitarse, volverse más poroso y perder brillo por los cambios de temperatura

Estos son los alimentos que ayudan a mantener un pelo grueso y brillante

Cabello sano y fuerte | Canva

El otoño es una estación en la que muchos notamos cambios en nuestro cabello: la caída estacional, el debilitamiento y la pérdida de brillo son problemas comunes durante esta época. Y es que esto es un reflejo directo de nuestra nutrición y estilo de vida.

En particular, la farmacéutica María Esther García de la Cruz ha destacado la importancia de ciertos alimentos para mantener un cabello grueso y brillante.

Según la experta, incorporar nutrientes específicos en nuestra dieta no solo fortalece el cabello desde la raíz, sino que también mejora su aspecto general.

¿Cómo cuidar tu cabello en otoño? ¡Apunta!

Durante el otoño, el cabello suele volverse más débil, poroso y opaco. Esto se debe a factores como los cambios de temperatura, la humedad y la exposición al sol durante el verano, que lo dejan más propenso a la caída y al daño.

Por ello, es esencial adaptar tu rutina de cuidado capilar para contrarrestar estos efectos y prevenir la pérdida excesiva de cabello.

1. Importancia de una buena alimentación

La salud capilar empieza desde dentro, explica la experta. Incluir alimentos ricos en biotina, como huevos, aguacates y avellanas, es fundamental para frenar la caída y fomentar el crecimiento del cabello desde la raíz.

Asimismo, consumir alimentos con vitamina C, como kiwis, brócoli y cítricos, refuerza la fibra capilar gracias a sus propiedades antioxidantes, que ayudan en la producción de colágeno.

2. Incorpora un extra de biotina en tu dieta

La biotina es un nutriente esencial para el cabello, ya que favorece su mantenimiento desde la raíz y mejora su grosor y volumen.

Qué vitaminas tomar para tener un cabello sano
Qué vitaminas tomar para tener un cabello sano. Unsplash

Según De La Cruz, hay estudios que han demostrado que la ingesta regular de biotina durante al menos tres meses genera un cabello más fuerte, brillante y con mayor densidad. Esta vitamina se encuentra en alimentos como almendras, espinacas, mariscos y patatas.

3. ¡Qué no se te olvide el colágeno!

El colágeno no solo es clave para una piel saludable, sino también para un cabello fuerte. Durante el otoño, incluir en tu dieta alimentos que favorecen la producción de colágeno, como pescados, carnes rojas, pimientos rojos, frambuesas y tomates, puede dar un impulso extra a la vitalidad de tu melena.

4. Una correcta rutina capilar

Una correcta rutina de lavado y secado es fundamental para mantener un cabello sano. Es recomendable peinarlo antes de lavarlo, ya que mojado se enreda con mayor facilidad, lo que puede provocar roturas.

Usa agua tibia para lavar tu cabello y finaliza con agua fría para sellar las cutículas y darle más brillo. Si usas secador, opta por aire frío, mantenlo a una distancia prudente y aplica protector térmico para evitar el daño por calor.

5. Hidratación con aceites naturales

Además de cuidar tu cabello desde dentro, la hidratación externa también es clave. Incluir aceites naturales en tu rutina capilar puede marcar la diferencia.

Aplica unas gotas en medios y puntas tras el secado para sellar la hidratación y controlar el sebo. También puedes usarlos como mascarilla antes del lavado, dejándolos actuar durante unos minutos para nutrir el cabello en profundidad.

¿Cada cuánto hay que lavar el cabello?

Lavar el cabello es esencial para eliminar el exceso de grasa, la suciedad, los restos de productos y las partículas de contaminación acumuladas.

Sin embargo, es importante encontrar el equilibrio adecuado, ya que un lavado excesivo puede causar sequedad e irritación, especialmente en ciertos tipos de cuero cabelludo.

No existe una regla universal para la frecuencia del lavado, ya que esta depende de varios factores, como el tipo de cuero cabelludo que tengas y tus hábitos diarios. Algunos aspectos a considerar incluyen:

  • Tipo de cuero cabelludo: graso, normal, seco o sensible.
  • Frecuencia de ejercicio: más actividad física puede requerir lavados más frecuentes.
  • Exposición a contaminantes: mayor exposición puede aumentar la necesidad de lavado.
  • Uso de productos capilares: el uso excesivo de cosméticos puede requerir lavados más frecuentes.

Por ejemplo, una persona con un cuero cabelludo graso, que hace ejercicio diario, usa muchos productos capilares o tiene afecciones como la dermatitis seborreica, probablemente necesitará lavar su cabello casi a diario.

En contraste, aquellos con un cuero cabelludo normal o seco pueden espaciar los lavados a cada 2 o 3 días. Para un cuero cabelludo sensible, un lavado regular, pero suave puede ser beneficioso.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D