Arco senil: qué es y por qué aparece este borde blanquecino alrededor del ojo
Propia de los mayores de 60 años, esta patología podría aparecer mucho antes en determinadas personas
Un hombre en un gabinete del optometrista. | ©Freepik
La salud ocular es uno de los aspectos que más se resienten a medida que cumplimos años. Con el paso del tiempo, las funciones visuales se ven afectadas por diversos factores, suponiendo así a un deterioro progresivo en la calidad de la visión. Condiciones como la miopía magna, las cataratas y la degeneración macular suelen ser comunes en las personas mayores. Además, el desarrollo del arco senil, un borde blanquecino que aparece alrededor del ojo, es un fenómeno frecuente asociado con el envejecimiento. Estos problemas no solo pueden afectar la capacidad de ver con claridad. También impactan la calidad de vida de quienes los padecen, como ya contamos en THE OBJECTIVE.
Entre estas patologías, el arco senil es quizás uno de los menos conocido, aunque suele pasar desapercibido por no interferir directamente con la visión. A su vez, la miopía magna, una forma severa de miopía, puede aumentar el riesgo de desprendimiento de retina. Por su parte, las cataratas causan una opacificación del cristalino que afecta la nitidez visual. En otro modo, la degeneración macular, que afecta la parte central de la retina, se convierte en una de las principales causas de ceguera en personas mayores. Todos estos problemas tienen en común el deterioro natural que sufre el ojo con el paso del tiempo.
Además de los efectos del envejecimiento en la salud visual, el uso cada vez más prolongado de las pantallas en la vida cotidiana está agravando esta situación. Las nuevas generaciones, que pasan largas horas frente a dispositivos electrónicos, muestran signos de fatiga visual a edades más tempranas. Esta tendencia podría anticipar un empeoramiento generalizado de la salud ocular en comparación con generaciones anteriores, donde el uso de pantallas era mucho más limitado. Factores como la luz azul y la falta de descansos adecuados contribuyen al aumento de patologías oculares. En ellas, además, se incluye la aparición precoz de condiciones como el arco senil.
Arco senil: qué es y por qué aparece
El arco senil (también llamado arcus aenilis) es un anillo blanquecino o grisáceo que aparece alrededor de la córnea, en la zona que rodea el iris. Este fenómeno, también conocido como gerontoxon, se produce por la acumulación de lípidos en la periferia de la córnea. Se trata de una patología ocular bastante común en personas mayores y está estrechamente relacionada con el envejecimiento natural del cuerpo. Según Clínica Baviera, el arco senil no afecta la visión, ya que la opacidad que se forma no interfiere en la zona central de la córnea, que es donde se enfoca la luz.
El arco senil aparece generalmente en personas mayores de 60 años. No obstante, no es exclusivo de esta franja etaria, pero es raro verlo en personas más jóvenes. Este anillo blanquecino es más visible a simple vista a medida que progresa y no suele presentar otros síntomas. Sin embargo, su presencia es más común en hombres que en mujeres. La acumulación de colesterol, triglicéridos y otros lípidos en la córnea es la causa principal de su aparición. Sucede porque, con el tiempo, los vasos sanguíneos pierden parte de su capacidad para regular correctamente estos componentes.
Cómo se diagnostica
El diagnóstico del arco senil es bastante sencillo y suele realizarse en una revisión ocular rutinaria. El oftalmólogo puede identificar fácilmente la formación de este borde alrededor de la córnea con una lámpara de hendidura o simplemente a través de la observación directa del ojo. No se requieren pruebas adicionales, ya que su aparición es clara y fácilmente identificable por los especialistas. Es importante destacar que, aunque no afecta la visión, es un signo más del envejecimiento del organismo. Eso no quita que puede haber modificaciones en las propiedades biomecánicas de la córnea, como advierte este estudio. Además de que puede ser un indicador de otros problemas de salud que requieren atención.
Cuándo prestar atención al arco senil
A pesar de que el arco senil es una patología inofensiva y muy común en personas mayores, en algunos casos puede ser motivo de preocupación. En personas jóvenes, la aparición del arco senil puede ser un indicativo de un problema subyacente, como el colesterol alto o los triglicéridos elevados. Aunque no tiene consecuencias directas sobre la visión, su presencia en menores de 40 años debe ser investigada por un médico para descartar posibles alteraciones metabólicas. De hecho, se ha observado que, en personas jóvenes, este anillo blanquecino puede estar relacionado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.
Cuando el arco senil aparece a edades tempranas, lo recomendable es realizar un análisis de sangre para comprobar los niveles de colesterol y triglicéridos. Si estos resultan elevados, el médico podrá sugerir cambios en el estilo de vida, como una dieta más equilibrada, aumentar la actividad física y, en algunos casos, la administración de fármacos hipolipemiantes. Controlar los niveles de colesterol no solo ayuda a prevenir la progresión del arco senil, sino que también es clave para reducir el riesgo de enfermedades del corazón y otros problemas vasculares.
En cualquier caso, el arco senil en sí mismo no requiere tratamiento, ya que no afecta la calidad de la visión ni produce otros síntomas molestos. Sin embargo, su aparición debe verse como una señal de advertencia, especialmente en personas jóvenes. Atajar las causas subyacentes, como el colesterol alto, puede ayudar a prevenir complicaciones más graves en el futuro. En resumen, aunque el arco senil no es motivo de alarma en la mayoría de los casos, puede ofrecer pistas valiosas sobre la salud cardiovascular de una persona.
