Qué es el inemuri, la siesta que los japoneses se echan en el trabajo, y cuáles son sus beneficios
Aunque parezca una costumbre mediterránea, estas cabezaditas tienen más adeptos de los que parecen
La siesta, como parte de la rutina diaria, es una tradición que asociamos comúnmente con países del arco mediterráneo. En España, Italia o Grecia, detenerse tras la comida para descansar unos minutos es casi un símbolo cultural. Sin embargo, la siesta no es exclusiva de estas regiones. En muchos rincones del mundo, otras sociedades han adaptado también este descanso breve a su estilo de vida.
Un ejemplo claro es Japón, donde existe desde hace décadas una práctica conocida como inemuri. Esta siesta, aunque más breve y diferente a la que conocemos en España, ha ganado popularidad entre los japoneses. Específicamente, se realiza en cualquier momento del día y en casi cualquier lugar, incluso en el entorno laboral. Lejos de verse como una falta de profesionalidad, en la sociedad nipona se entiende como una señal de esfuerzo y dedicación.
A lo largo de los años, esta costumbre se ha convertido en una parte aceptada de la vida diaria de los japoneses. La cultura del trabajo en Japón es conocida por sus largas jornadas, lo que ha llevado a que el inemuri se considere una manera legítima de recargar energías sin dejar de cumplir con las responsabilidades laborales. Esta práctica forma parte de una visión más amplia del bienestar y del equilibrio entre la productividad y el descanso.
Los beneficios de echarse la siesta
Diversos estudios han avalado los beneficios que tiene la siesta para la salud física y mental. Algo de lo que hemos hablado varias veces en THE OBJECTIVE. Numerosas investigaciones indican que dormir un breve periodo de tiempo después de la comida puede mejorar la concentración y la capacidad de tomar decisiones. Además, ayuda a reducir el estrés y a mejorar el estado de ánimo. Según un estudio publicado en Scientific Reports, dormir entre 10 y 30 minutos durante el día ayuda a mejorar el rendimiento cognitivo sin afectar negativamente al sueño nocturno.
El descanso breve permite al cerebro desconectar, lo que facilita procesar mejor la información posterior. Incluso se ha demostrado que el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares disminuye en quienes incluyen la siesta en su rutina. Otro aspecto relevante es que las siestas pueden mejorar la memoria. Estudios como el de la Universidad de Harvard han señalado que aquellos que duermen siesta retienen mejor la información y son más creativos a lo largo del día. Algo de lo que se hacía eco The New York Times.
La siesta, por tanto, no solo es una tradición cultural, sino también una herramienta de bienestar que ayuda a optimizar el rendimiento y el bienestar personal. Cada vez más investigaciiones respaldan estos beneficios, animando a incluirla dentro de la rutina diaria cuando sea posible.
Qué es el inemuri japonés: la siesta en el trabajo
El inemuri es una práctica que ha crecido en Japón desde la década de 1980. Literalmente, la palabra significa «dormir mientras se está presente», y es una siesta que se puede tomar en cualquier momento y lugar, incluso en medio de reuniones de trabajo. A diferencia de la siesta mediterránea, que se realiza en casa, el inemuri se entiende como un acto breve, muchas veces inconsciente, que muestra que la persona ha estado trabajando arduamente hasta el punto de quedarse dormida.
Esta costumbre se popularizó en Japón debido a la intensa cultura laboral. Con jornadas extensas y una gran presión social para demostrar compromiso, el inemuri se percibe como una manera aceptada de recuperar fuerzas sin desatender las obligaciones. En lugar de ser visto como una señal de flojera, aquellos que practican el inemuri son considerados trabajadores comprometidos.
No hay un momento específico para echarse un inemuri, pero es común verlo en transportes públicos, oficinas y reuniones. Las personas pueden quedarse dormidas por unos minutos, sin perder el ritmo de trabajo. Para los japoneses, esta es una forma eficaz de mantenerse alerta y productivo en entornos demandantes. El inemuri no es solo una siesta, sino un reflejo de la disciplina y la dedicación del trabajador japonés en su vida diaria.