Revilla visita 'El hormiguero' en plena polémica con el Rey: «Tengo la conciencia muy tranquila»
La visita del expresidente llega el mismo día que Juan Carlos ha decidido interponer una demanda contra él

Miguel Ángel Revilla en una de sus múltiples visitas a 'El hormiguero'.
El expresidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha visitado este martes El hormiguero, el programa de Pablo Motos en Antena 3, en plena polémica por sus declaraciones contra el rey Juan Carlos I. “Necesitaría un programa de tres horas”, ha asegurado Revilla nada más sentarse ante la mesa de Motos, “para contar todas las cosas que tengo en la cabeza”. Eso sí, asegura tener “la conciencia muy tranquila”.
Revilla estuvo recientemente en un acto de conciliación en los juzgados por la demanda interpuesta por el Emérito por injurias y calumnias. “La abogada [del exmonarca] dijo que yo estaba en ventaja sobre el rey. Presupone que yo soy un aforado. Yo no soy aforado”, ha asegurado Revilla. “Yo no tengo el privilegio del señor Ábalos. Yo no quiero privilegios”. Revilla también ha asegurado que si la multa de 50.000 euros llega, la pagará él íntegramente, sin pedir dinero a nadie.
Durante buena parte del programa, el expresidente cántabro se ha dedicado a relatar ante Pablo Motos algunos de los principales logros de sus casi dos décadas gobernando la región del norte de España. En ocasiones, incluso, hablando de sí mismo en tercera persona. Motos, no ha tenido más remedio que dejarle hablar largo y tendido. Asimismo, se ha reafirmado en el relato de considerar un “corrupto” a Juan Carlos I.
La visita del expresidente llega el mismo día que Juan Carlos ha decidido interponer una demanda contra él, en los tribunales de Madrid, después de que el intento de conciliación llevado a cabo el pasado viernes en Santander no llegara a buen puerto.
Así lo indicaron a Europa Press fuentes conocedoras del proceso, tras la celebración del acto de conciliación el 16 de mayo, que terminó sin acuerdo. En dicha cita, el rey emérito no asistió en persona, aunque sí lo hicieron su representante legal, Guadalupe Sánchez, y su procurador.
Por su parte, Revilla optó por no retractarse de sus declaraciones sobre el exjefe del Estado, alegando que considera veraces sus afirmaciones. «Yo no rectifico en nada de lo que mis condiciones personales me hacen pensar que estoy en lo cierto», expresó el político cántabro al abandonar los juzgados de Santander ese mismo día.
Ante el fracaso de la conciliación, el líder regionalista ya intuía que Juan Carlos I –quien optó por pasar ese día navegando en Sanxenxo, Pontevedra, en lugar de acudir al acto judicial– seguiría adelante con el proceso legal.
«Me veo en el banquillo a punto de cumplir 83 años», comentó Revilla. El exmonarca no solo exigía una disculpa pública, sino que también solicitaba una indemnización de 50.000 euros por unas declaraciones que consideró ofensivas y que fueron emitidas en diversos programas televisivos.