Trucos para no quedarse dormido al volante
Evitar viajar por las noches y hacer paradas cada dos horas o 200 kilómetros son algunas de las formas de evitar la fatiga al conducir
Los viajes largos en coche son muy comunes en la época vacacional y es normal que aparezcan fatiga y cansancio mientras estás al volante. Estas condiciones aumentan el riesgo de sufrir un accidente tráfico, es más, aproximadamente el 20% de estos siniestros están causados por el cansancio o la fatiga. Por ello, la DGT es especialmente insistente en la necesidad de dormir bien antes de un viaje largo, así como de realizar paradas a lo largo del camino para poder recuperar fuerzas.
Estos son los principales consejos a tener en cuenta, aunque también hay otra serie de recomendaciones que es posible poner en práctica a la hora de conducir y que permiten mantener la atención y reducir el cansancio. Estas son 20 formas de mantener la energía activa al conducir para evitar sustos al volante.
Cómo alejar la fatiga al volante
Aunque algunos de ellos son muy conocidos, no siempre se aplican y, al final, son acciones muy sencillas que pueden evitar más de un susto:
- Conducir de día siempre es mejor que de noche, ya que la posibilidad de que aparezca sueño es algo menor. No obstante, en ambos casos es recomendable hacer paradas cada dos horas o 200 kilómetros, para retrasar el cansancio.
- En cuanto aparezcan los primeros síntomas de sueño hay que parar para despejarse, incluso hacer una pequeña siesta de unos 20 minutos.
- El cuerpo está acostumbrado a una serie de horarios, por lo que las horas más peligrosas para conducir son entre las 3 y las 5 de la madrugada y las 14 y las 16 de la tarde, ya que es cuando es más común que aparezca el sueño.
- Los trayectos cortos, sobre todos aquellos que son por autopistas, también pueden dar lugar a la aparición del cansancio. Por ello no hay que confiarse nunca al ir al volante.
- Hay que dormir un mínimo de siete horas la noche anterior a hacer un viaje por carretera.
- Durante el tiempo al volante hay que tener una postura que no sea excesivamente relajada, además de tener siempre la espalda recta y las dos manos en el volante.
- La temperatura dentro del vehículo es importante que esté regulada. La calefacción excesiva da más pie a que aparezca somnolencia, por lo que es mejor abrir las ventanillas o incluso encender el aire acondicionado si el ambiente es muy cálido.
- La banda sonora del viaje también es importante; hay que evitar las canciones muy relajantes, precisamente para mantenerse despierto al volante.
- En relación con esto, cantar o hablar con las personas del coche, siempre sin llegar al punto de distraerse de la carretera, es una buena forma de mantenerse despierto.
- Antes de hacer un viaje en carretera hay que evitar alimentos que ocasionen digestiones pesadas; lo mejor es optar por frutas, verduras o una comida ligera.
- Beber agua suficiente es importante porque ayuda a evitar la fatiga muscular al volante, lo que puede derivar en fatiga.
- Las bebidas estimulantes o con cafeína suelen ser las elegidas para combatir el cansancio, pero hay que tener cuidado porque pueden dar lugar al efecto rebote.
- Siempre que sea posible es mejor hacer turnos de conducción para que las personas puedan descansar.
- Cuanto más edad más normal es que aparezca somnolencia al volante, por lo que hay que prestar atención a su estado.
- El agua fría o las toallitas húmedas para refrescarse en la cara son una forma de disminuir la fatiga.
- Tomar un caramelo o masticar chicle puede ayudar a mantener la atención.
- Existen aplicaciones que detectan la somnolencia e incluso un detector de fatiga para el coche, aunque algunos vehículos ya llevan uno configurado.
- En relación con esto, lo mejor es aprovechar al máximo la tecnología del vehículo para evitar la fatiga y sus efectos en la conducción. Algunos ejemplos son el detector de cansancio o la alerta de cambio involuntario de carril.
- Las paradas es bueno aprovecharlas para hacer ejercicios de estiramiento que ayuden a mantener el tono muscular, como mover la cabeza hacia los lados o estirar los brazos.
- Hacer ejercicios fuera del vehículo al parar el coche, dando un pase o haciendo estiramientos más generales.