Sanidad recula y dice ahora que no prohibirá fumar en vehículos privados 

El futuro nuevo Plan Integral del Tabaquismo (PIT) 2024-2027 está provocando algún que otro dolor de cabeza al Ministerio de Sanidad, como cabía esperar. Y es que el borrador, al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, recoge medidas un tanto polémicas, como incrementar los precios del tabaco y equiparar el cigarrillo electrónico al convencional.

Ahora, el secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla –con el Plan estancado en la Comisión de Salud Pública– ha señalado en su cuenta de Telegram que las informaciones sobre la prohibición de fumar en vehículos privados son «inexactas». «Se trata simplemente de una recomendación (la misma recomendación de sentido común que, a nivel individual, daría cualquier profesional sanitario: ‘No fumes en el coche si vas con tus hijos o con una embarazada’», aclarando que «los ámbitos privados que se habla de legislar se refiere a lugares privados de uso público (hostelería, por ejemplo)». 

No obstante, el texto, consultado por este medio y que es un calco del Plan elaborado en 2021 por Carolina Darias –que nunca vio la luz– en el cual sí se indica expresamente la intención de  prohibir el tabaco en «ciertos espacios del ámbito privado (vehículos particulares)», hace hincapié «en la concienciación sobre fumar en espacios privados cuando se convive con alguien más (tanto en el hogar, coche etc.) y especialmente en el caso de niños y niñas y personas con problemas de salud». 

Ampliación legislativa

Sin embargo, si consultamos la estrategia legislativa del Plan en su meta/objetivo número 3 ‘Reducir la exposición ambiental a las emisiones de tabaco y productos relacionados en espacios públicos y privados’, esa «concienciación» deriva implícitamente en prohibición a través de la «ampliación legislativa de los espacios sin humo de tabaco y sin aerosoles de cigarrillos electrónicos y productos relacionados en determinados ambientes comunitarios y sociales al aire libre, y en ciertos espacios del ámbito privado, especialmente aquellos con presencia de menores». 

En ningún momento del texto, cuando se habla de ampliar los espacios libres de humo en ciertos lugares del ámbito privado se especifica que son espacios privados de uso público, como apunta Padilla en Telegram. En este sentido, fuentes conocedoras del Plan Integral de Tabaquismo, señalan a THE OBJECTIVE que la intención inicial del Ministerio de Mónica García «siempre ha sido la de vetar el tabaco en los coches privados, sin embargo, esta cuestión es muy difícil de encajar legislativamente, por lo que ahora están reculando».

El Plan se atasca en la Comisión de Salud Pública

La Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial se reunió el pasado 14 de marzo, como adelantó este medio, para votar el texto que contempla la prohibición de fumar en terrazas. Sin embargo, finalmente, los técnicos de las comunidades autónomas pidieron más tiempo para presentar nuevas alegaciones y valorar nuevas evidencias científicas. «La realidad es que se trata de un documento global, que probablemente por el ruido mediático que ha generado estos días, el Ministerio directamente nos ha planteado 15 días para enviar observaciones por el impacto de las líneas de actuación que se proponen», explicaba la directora general de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, Elena Andradas, tras el fin de la reunión.

Todo ello será analizado en una «próxima reunión extraordinaria de la Comisión que será monográfica sobre el plan», para la que aún no hay fecha. Así, tras su aprobación por esta Comisión, el texto pasará al Pleno del Consejo en otra reunión. Una vez reciba luz verde por parte de la Interterritorial, las medidas tienen que ser transpuestas –mediante ley o decreto– a la normativa estatal –que lleva más de una década sin actualizarse– o autonómicas, ya que el plan no es una ley, sino simplemente una guía a partir de la cual habrá que modificar la legislación.

«Hay que evitar el prohibicionismo»

En conversaciones con este medio, desde la Plataforma para la Reducción de daño por Tabaquismo, formada por medio centenar de médicos, científicos, catedráticos y especialistas en tabaquismo, abogan por huir de medidas prohibicionistas y ofrecen soluciones realistas al fumador, como hacen Reino Unido o Suecia. En relación a vetar el tabaco en el interior de los vehículos privados, el doctor Fernando Fernández, portavoz de la Plataforma, consideraba que es una medida «utópica»: «Es trasladar a la Policía un problema de salud pública. El trabajo de educación no se le puede adjudicar a la Policía. Hay que educar en los núcleos familiares».

Desde la Plataforma señalan que este Plan nace «obsoleto» y consideran un «error» la equiparación en términos de salud pública de lo que son las herramientas de reducción del daño del tabaco comparado con lo que es el tabaco de combustión. «Existe una gran cantidad de literatura científica que demuestra el potencial de las alternativas de reducción de daño, como los cigarrillos electrónicos, el tabaco calentado, las bolsas de nicotina y/o el snus o tabaco oral, para dejar de fumar. Cualquier debate que excluya la ciencia sólo alentará a los más de nueve millones de españolas y españoles a seguir fumando», defienden.

Según la OMS, 1.000 millones de personas morirán en este siglo por su causa. La Comisión Europea prevé reducir la prevalencia de consumo diario de tabaco a menos del 5% para el año 2040, y la previsión de este Plan para 2028 es alcanzar un 6% en jóvenes de 14-18 años, con mayor reducción de la prevalencia en chicas (de dos puntos con respecto a un puntos en los chicos), y una cifra inferior al 20% en población de 15 años en adelante

En España, el consumo de tabaco provoca cerca de 63.000 muertes anuales, el 21% de ellas en menores de 65, siendo la segunda sustancia psicoactiva más consumida en el país (39,0%), después del alcohol (76,4%), según la Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España (Edades 2022).