Lilly demanda a varias empresas por falsificar su medicamento contra la obesidad Mounjaro
«Cualquier Mounjaro que se ofrezca para su compra en las redes sociales es ilegal», anuncia la farmacéutica
Eli Lilly intensifica sus esfuerzos para combatir la venta de falsificaciones de su popular medicamento para la diabetes y la pérdida de peso, Mounjaro. Por ello es que ha anunciado la presentación de varias demandas contra centros de bienestar, clínicas de estética e incluso centros de pérdida de peso que, según la farmacéutica, están utilizando publicidad falsa para «engañar a los pacientes haciéndoles pensar» que están proporcionando «medicamentos clínicamente estudiados por Lilly».
En un comunicado de prensa, el fabricante de medicamentos con sede en Indianópalis, ha detallado cuál es el uso apropiado de sus medicamentos GLP-1/GIP y ha advertido sobre los «riesgos potencialmente graves que plantea la proliferación de versiones falsificadas, compuestas y otras versiones no probadas» de su producto de tirzepatida Mounjaro.
Las nuevas denuncias de Lilly han sido contra Capitol Contours, en Virginia, de Alexandria, Virginia; Houston Weight Loss Centers, en Texas; y Cleveland Health Group y Lucy’s Laser & Mepspa en Ohio. También se enfrentan a demandas el centro de telemedicina Metabolic MD y el médico estadounidense Stuart Lerner, informa Fierce Pharma, que recuerda que el mes pasado, Lilly llegó a un acuerdo con Totality MediSpa, con sede en Carolina del Sur, lo que obligó a la compañía a dejar de «engañar a los consumidores haciendo creer» que está vendiendo Mounjaro.
Lilly anuncia que cualquier venta en RRSS es ilegal
«Lilly está profundamente preocupada por la proliferación de ventas en línea y publicaciones en las redes sociales que involucran versiones falsificadas y versiones inseguras o no probadas de lo que dicen que es tirzepatida», apunta Lilly en su comunicado, y recuerda que la farmacéutica no vende Mounjaro por redes sociales. «Cualquier Mounjaro que se ofrezca para su compra en las redes sociales es ilegal. Estos productos son falsos o están «revendidos» por una persona que los obtuvo por otros medios. Ambas prácticas ponen a las personas en riesgo».
Según la Asociación Nacional de Juntas de Farmacia (NABP), «actores ilegales se están aprovechando de la alta demanda y la escasez de oferta [de medicamentos contra las incretinas] para vender versiones falsificadas y de calidad inferior a estos productos a pacientes de todo el mundo». La NABP «ha identificado miles de sitios web que promueven la venta ilegal de agonistas de GLP-1», incluidas versiones falsas o inseguras de Mounjaro y productos de ‘tirzepatida’. Sus «acciones ilegales ponen a los pacientes en riesgo», insisten desde Lilly.