Pekín ha extendido el área de cuarentena de la ciudad, para incluir un total de 10 barrios, mientras que las autoridades sanitarias están tratando de identificar quienes visitaron recientemente el mercado de Xifandi, una lonja mayorista de verduras que se considera el nuevo foco de contagios de coronavirus [contexto id=»460724″].
En contexto: China ha registrado este lunes 49 nuevos contagios de coronavirus. Del total de casos, 36 de ellos se han detectado en Pekín. La situación generalizada alimenta el temor ante una segunda ola de infecciones.
Los barrios residenciales colindantes al mercado ya habían sido aislados. Ahora, los mandatarios de varias ciudades han advertido a los residentes que no viajen Pekín. Las autoridades están intensificando los rastreos para tratar de comprobar quienes visitaron el mercado, mediante el envío de mensajes a los ciudadanos en el que se pregunta cuáles han sido sus movimientos recientes.
El brote interno en China, donde la enfermedad fue identificada por primera vez el año pasado, ha estado en gran medida controlado. Pero la semana pasada comenzó un resurgimiento de contagios en la capital. Además de los nuevos casos en Pekín, la Comisión Nacional de Salud ha señalado que existen tres nuevos en la provincia de Hebei, que rodea la capital. Por su parte, todas las escuelas han sido cerradas y los vecinos de los barrios aledaños han recibido instrucción de permanecer en confinamiento.
Además, el gobierno municipal de Pekín ha despedido a un jefe de distrito y a otros dos funcionarios por no haber sido capaces de impedir este nuevo brote de coronavirus surgido en el principal mercado de la ciudad. Según el periódico Beijing Daily, el subdirector del distrito de Fengtai, Zhou Yuqing, ha sido destituido por «incumplir con su deber en los trabajos de prevención y control de la COVID-19».
La ciudad ha intensificado la inspección de los mercados de productos frescos, cerdo congelado, ternera, cordero y productos avícolas, y se están examinando otros negocios como supermercados y restaurantes para garantizar la no contaminación de los productos.
En ese sentido, la viceprimera ministra china Sun Chunlan ha instado a tomar «medidas decididas» para detener la propagación de este nuevo brote, así como «investigaciones epidemiológicas estrictas» y un «rastreo exhaustivo de la fuente» para identificar y controlar la fuente de infección.