Pacientes inmunodeprimidos consiguen negativizar el coronavirus con plasma de donantes recuperados
Narendra Shrestha | EFE
Tres pacientes inmunodeprimidos con COVID-19 han negativizado el virus en el Hospital Regional de Málaga gracias a la transfusión de plasma de donantes, una experiencia pionera por sus características en la sanidad española.
En contexto: el objetivo de la transfusión de plasma con anticuerpos de otros infectados era proporcionarles inmunidad a pacientes que por sus características –debido, principalmente, a enfermedades previas– no podían generar sus propios anticuerpos frente al coronavirus. Los donantes son pacientes que han pasado la COVID-19 y que tienen que haber dado negativo en el cultivo nasofaríngeo –la prueba del bastoncillo– dos semanas antes de donar plasma.
El primer paciente, de 26 años, tenía una inmunodeficiencia congénita en tratamiento con inmunoglobulinas hiperinmunes desde que era lactante y los otros dos pacientes, de 66 y 62 años, tenían un importante déficit de producción de inmunoglobulinas por el tratamiento de la enfermedad que padecían.
Los tres lograron negativizar el virus y, si bien en algunos se han usado varias dosis, en general parece ser suficiente una dosis única de 300 mililitros para controlar la enfermedad, que cesen los síntomas y se negativice el coronavirus.
A raíz de una serie de publicaciones en China, se descubrió que, en pacientes con infección grave por coronavirus, el plasma de convalecientes podría resultar de utilidad, dado que conseguía que los pacientes mejoras en su cuadro clínico y radiológico y se lograba la negativización del virus, según ha explicado el especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Regional de Málaga.
Desde la primera sospecha de infección de COVID-19 en Málaga, este hospital ha analizado cada caso de coronavirus ingresado en el centro. Así, cuando reingresó un paciente con coronavirus y un defecto congénito en la producción de anticuerpos, se decidió solicitar a la Red Andaluza de Medicina Transfusional, Tejidos y Células plasma de convaleciente.
Una vez observada la excelente respuesta del paciente a este tratamiento, se planteó en nuevos inmunodeprimidos que estuviesen aún infectados.
Los expertos del hospital han observado que el plasma de convaleciente también puede ser útil para los pacientes con un sistema inmune normal, si se administra en la primera semana, cuando aún no ha tenido tiempo de elaborar sus propios anticuerpos frente al virus.
Sin embargo, creen que para aquellos pacientes cuyo sistema inmunitario no los producen va más alla: es una necesidad para lograr el control y la eliminación del virus.
