Los expertos descartan que la viruela del mono se convierta en una nueva pandemia
Se han confirmado casos en una docena de países, pero los especialistas sostienen que su contagio es mucho más limitado que el del coronavirus
Los expertos quieren tranquilizar a la población. Descartan que la viruela del mono se convierta en una nueva pandemia a pesar de que se hayan confirmado casos en una docena de países. El mayor brote se encuentra en España, donde se han certificado 30 positivos, todos ellos en Madrid. Los especialistas reconocen que el contagio de este virus es mucho más limitado que el del coronavirus. No obstante, el Gobierno ya prepara la compra de miles de dosis de la vacuna de la viruela tradicional para frenar la transmisión.
La aparición de la viruela del mono en el Reino Unido el 7 de mayo encendió las alarmas. En los días sucesivos, la enfermedad comenzó a propagarse por Europa y América hasta elevar la preocupación de las autoridades sanitarias. Su expansión ratifica la idea de que hay transmisión comunitaria, ya que muchos de los pacientes no están relacionados entre sí. A pesar del impacto visual que causa la infección, los expertos insisten en que no se trata de una enfermedad mortal y que en la mayoría de los casos no genera complicaciones.
Síntomas de la viruela
Los síntomas son similares a los de la viruela tradicional, aunque algo más leves. Pueda dar lugar a fiebre, dolores musculares y de cabeza y a unas erupciones cutáneas que afectan a todas las zonas del cuerpo, especialmente rostro y extremidades. Como la covid-19, tiene origen zoonótico, es decir, que puede transmitirse entre animales y seres humanos. No obstante, la viruela del mono ya se conocía. Se llama así porque fue descubierta en esos animales en 1958, aunque también se puede encontrar en roedores. El primer contagio a humanos se detectó en 1970 en la República Democrática del Congo.
La mayoría de los casos se han circunscrito a África, pero en ocasiones han saltado a otros continentes. La última vez, a Estados Unidos, donde en 2021 se detectaron varios positivos. La enfermedad está causada por un ortopoxvirus de la familia de la viruela, la primera enfermedad erradicada gracias a las vacunas. Según el prestigioso microbiólogo César Nombela ha sido «el patógeno más mortífero de la historia de la humanidad» porque «solo en el siglo XX ha causado más de 300 millones de muertes». La Organización Mundial de la Salud (OMS) certificó su erradicación en 1979 y un año después se suprimió la vacuna.
«Parece que quienes se vacunaron de la viruela en la infancia están más protegidos, cuentan con mayor inmunidad», explica Nombela, que presidió el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) entre 1996 y 2000. En su opinión, la población no debe estar especialmente preocupada por esta enfermedad. «Las autoridades sanitarias van a controlar los casos. Los sospechosos deben ser aislados porque si no, podría ser muy preocupante». No obstante, resta dramatismo porque «este virus no es tan contagioso como la covid».
Nombela recomienda realizar un seguimiento estricto e identificar los casos. Explica que el virus puede mutar, pero que estos ortopoxvirus tienen un genoma infinitamente mayor que la covid-19, por lo que «no son susceptibles a cambios tan significativos». Una opinión que comparte el epidemiólogo Juan José Badiola. «La gente está condicionada por el coronavirus, pero eso no se va a repetir ahora», afirma este veterinario leonés que saltó a la fama por sus estudios sobre el mal de las vacas locas.
30 casos en España
«Es muy difícil que se convierta en una pandemia como la del coronavirus. El sistema de transmisión es diferente», insiste el investigador. Para contagiarse de la viruela del mono es es necesario un contacto estrecho, ya que se transmite por fluidos corporales: saliva, mocos, heridas, sudor y fluidos sexuales. Se puede transmitir también de forma indirecta, por contacto con objetos, pero es más complicado. En la mayoría de los casos detectados en Europa el motivo de contagio se han producido por relaciones sexuales sin protección entre hombres.
De hecho, los 30 casos confirmados en España son hombres. La Consejería de Sanidad ha identificado el origen del foco en una sauna. A pesar de que se haya empezado a detectar en el colectivo homosexual solo indica que es ahí donde se han localizado las cadenas de contagios, pero la transmisión puede afectar a ambos sexos y a personas de cualquier edad y condición. Badiola demanda que se investigue si existe relación entre los casos descubiertos confirmados en los distintos países para determinar si hay una única cadena de transición o más, «lo que significaría que el virus está más repartido».
«Hay que hacer un buen rastreo. No solo se puede dar por contacto sexual, también en el ámbito laboral, familiar o de amistad», insiste Badiola, que lamenta que se haya puesto el foco en el colectivo homosexual. Insiste en tranquilar a la población porque la viruela del mono no es una enfermedad letal. «En África sí, sobre todo en niños. Pero no por la enfermedad en sí, sino porque se contaminan las heridas, no tienen antibióticos y mueren por una sepsis», explica el experto.
Miguel Ángel Vázquez Ronda, especialista en medicina interna del Hospital Vithas Madrid La Milagrosa subraya que la viruela del mono es una enfermedad poco frecuente. «De momento no debe haber preocupación en la ciudadanía». El doctor explica que el periodo de incubación puede oscilar entre cinco y 21 días, pero que no existe una población vulnerable al contagio. E insiste: «Con los datos que poseemos, y poniendo el foco en otros brotes que han existido en otros países, no se considera la opción de que pueda convertirse en una nueva pandemia».
Cepas menos violentas
A pesar de que el virus tiene capacidad para mutar, Vázquez Ronda afirma que no entraña riesgo. «En muchos casos ocurre todo lo contrario, que las nuevas cepas que aparecen son menos virulentas». El internista reconoce que la mayoría de los pacientes pasan una enfermedad leve y que se recuperan sin necesidad de intervención médica. Además, estima que las personas vacunadas contra la viruela, aquellos que tienen más de 40 años, pueden llegar a tener un 80-85% más de protección contra la enfermedad.
Los especialistas resaltan que no existen tratamientos específicos para la enfermedad. Para tratarla recomiendan distintos antivirales. Tampoco hay vacuna, aunque el Gobierno ha anunciado que prepara la compra de miles de dosis de la inyección de la viruela tradicional para frenar los contagios. La UE considera «moderada» la transmisión de la viruela del mono, pero vigila su evolución. Suecia, en cambio, la ha declarado como una enfermedad «peligrosa» tras confirmar el primer caso.