Mejorar la memoria en pocos minutos: los juegos mentales más beneficiosos
Otra forma de cuidar el cerebro es siguiendo una alimentación adecuada y, concretamente, hay una serie de alimentos que ayudan a ello
El discurso de que tanto la memoria como otras capacidades mentales son como un músculo y que, por tanto, para mejorarlas o mantenerlas en el nivel más alto solo hace falta entrenarlas. Sin embargo, esto no es completamente real; hay muchos condicionantes que influyen en el desempeño neurológico. Además, ciertas formas de deterioro, como las que provoca el paso del tiempo o los desórdenes neurodegenerativos, son inevitables.
A pesar de esto, sí que es verdad que hay evidencia de que algunos factores del estilo de vida, como llevar una dieta apropiada, el ejercicio físico, el mantenimiento de vínculos sociales adecuados y sanos o realizar habitualmente actividades con un cierto grado de exigencia pueden ralentizar este proceso. Un ejemplo de esto puede ser practicar una serie de juegos que requieran usar la memoria o diferentes formas de razonamiento.
Debido a esto, la asociación sin ánimo de lucro ASISPA ha recopilado algunos de estos juegos. En general, apenas necesitan unos minutos para poder hacerlos; no obstante, para que surtan efecto habrá que practicarlos de forma regular.
Juegos para mejorar la memoria
- Puzzles
Los puzzles exigen memoria, para poder recordar todas las piezas vistas, concentración, paciencia y razonamiento visual. Todas estas son las que hay que intentar usar más para retrasar el deterioro neurológico. Además, en la actualidad existen multitud de aplicaciones, tanto para tablet como para smartphone, que son igual de válidas e incluso, en algunos casos, más prácticas que el formato físico.
- Juegos de cartas
Además de necesitar una buena retención de información, los juegos de cartas también tienen un componente estratégico muy importante. Por ello, es una manera sencilla y divertida de entrenar habilidades como cálculo al mismo tiempo que se mantienen relaciones sociales.
- Ejercicios de calendario y reloj
Los ejercicios de calendario (simplemente marcar el día, mes y año actual) y de reloj (leer la hora en relojes digitales o de aguja) son aún más simples que los anteriores. A pesar de ello, son una muy buena forma de mejorar la ubicación temporal y estructurar la percepción del pasado y el presente.
- Juegos de memorización
Puede parecer redundante, pero quizás la forma más fácil y directa de entrenar la memoria sea haciendo juegos de memorización en los que, por ejemplo, haya que recordar objetos que estén en un lugar concreto (un armario, la despensa…). Este ejercicio sirve mucho, de forma específica, para trabajar la memoria visual.
- Aprender
Intentar adquirir nuevas habilidades complejas es un ejercicio fundamental para poner en práctica las más básicas que ya se poseen. Algunas cosas como empezar a tocar un instrumento, asistir a clases, aprender nuevos idiomas o leer nuevos libros son actividades que, en la mayoría de los casos, pueden no necesitar más de una hora al día pero son muy gratificantes también en términos neurológicos.
Alimentos que ayudan a la memoria
Una investigación realizada por equipos del CIBEROBN y el Hospital del Mar de Investigaciones Médicas, y publicada en la revista Clinical Nutrition, ha puesto de manifiesto los beneficios que tiene para el celebro la eliminación de alimentos precocinados y de comida rápida. Además, también destaca lo beneficiosa que es la dieta mediterránea; y dentro de la misma, los mejores alimentos son:
- Pescado azul
Algunos peces como el salmón, la sardina o el chicharro son ricos en omega-3, unos ácidos grasos saludables que necesita el cerebro y que ayudan a reforzar las conexiones neuronales. Es más, los ácidos grasos omega-3 contribuyen a mejorar la memoria y reducen los riesgos de padecer enfermedades como el alzhéimer o la demencia.
- Aguacate
Esta fruta contiene muchas grasas monoinsaturadas que ayudan a potenciar la actividad neuronal y a mejorar la atención. Este tipo de grasas saludables tienen la función de limpiar las arterias, lo que garantiza que llegue al cerebro y al corazón la sangre necesaria para que los dos órganos funcionen a pleno rendimiento. Además del omega 3, el aguacate es rico también en vitaminas y antioxidantes.
- Verduras de hoja verde
Las espinacas, la col rizada y otras verduras de hoja verde cuentan con un alto contenido de antioxidantes que incluyen vitaminas C, E y A que ayudan a frenar el deterioro cognitivo. El consumo de brócoli, rico en vitamina K, junto con el de las coles de Bruselas y otras verduras verdes, ha obtenido buenos resultados en tratamientos para el alzhéimer. Una investigación de la Universidad de Montreal en Canadá destaca, además, que las personas mayores con más vitamina K retienen más información y realizan mejores discursos.
- Huevos
Este alimento contiene nueve aminoácidos esenciales y nutrientes básicos para el cerebro. En concreto, la yema tiene colina y luteína, que son fundamentales para la memoria y las funciones cognitivas en general. Es más, está demostrado que las personas con niveles más altos de luteína procesan más rápido la información.
- Yogurt
Este derivado lácteo tiene una combinación de proteínas y calcio que es idónea para mejorar la atención. De esta forma, la tirosina, un aminoácido que está en este alimento, produce los neurotransmisores de la dopamina y la noradrenalina, que ayudan a potenciar la memoria y el estado de alerta.
Tanto las nueces como las almendras son beneficiosas para la concentración, además de que favorecen el fortalecimiento cognitivo debido a su alto contenido en omega-3 de origen vegetal, vitamina E y magnesio. Además, dan gran cantidad de proteínas que estimulan las neuronas orexinas, encargadas de mantener a las personas despiertas y atentas.
- Té
Cuentan con el aminoácido L-teanina, el cual contribuye a incrementar la memoria, la concentración y el tiempo de reacción. El más recomendado es el té verde, ya que es rico en antioxidantes.
- Plátanos
Cuentan con altos niveles de potasio, magnesio, vitamina C y fibra, todos los cuales potencian la memoria. Además, tiene vitamina B6, la cual ayuda a la producción de serotonina, noradrelina y dopamina, que favorecen la concentración.