España, a la cola de la Unión Europea en inversión en I+D y muy lejos de los objetivos
Para alcanzar el objetivo del 2,12% del PIB en 2027, sería necesario duplicar el volumen de fondos destinados actualmente
La inversión en ciencia creció en torno a un 9% en 2022. | Unsplash
España invierte apenas un 1,41% de su Producto Interior Bruto (PIB) en investigación y desarrollo, lo que la coloca en el puesto 25º mundial y por debajo de la media europea, situada en el 1,96%. Además, nuestro país cuenta con 3.109 investigadores por cada millón de habitantes, también la posición 25ª, por los 3.704 del conjunto del Viejo Continente.
Son datos del UNESCO Institute for Statistics, la agencia de datos del mencionado organismo de Naciones Unidas, recogidos desde 2015. El periodo estudiado, eso sí, muestra que el porcentaje de PIB destinado a estas áreas ha crecido dos décimas en los últimos años y el número de investigadores por millón de habitantes, un 18,5%.
Por encima de España se sitúan países como Grecia, Hungría, Portugal, Estonia, República Checa o Eslovenia.
La inversión en investigación y desarrollo se sitúa, además, lejos de lo que el PSOE recoge como objetivo para la ciencia española en su página web: «Al final de la legislatura […] la inversión pública total representará al menos el 2,5% del gasto público en los Presupuestos Generales del Estado», además de «restablecer como objetivo estratégico el horizonte europeo de alcanzar una inversión total, pública y privada, del 3% del PIB en I+D+i».
Haría falta duplicar la inversión
Precisamente este miércoles se daba a conocer el indicador adelantado de la Fundación Cotec, que apunta a que el volumen de inversión en I+D del conjunto de los agentes económicos en España (es decir, no sólo del Estado, sino también del sector privado) creció en torno a un 9% en 2022. En términos absolutos, el aumento supera los 18.000 millones de euros, impulsado por la implementación de los fondos europeos de Next Generation EU.
Sin embargo, la inversión en I+D no habría conseguido aumentar su proporción en el PIB, hasta el punto de que el incremento de fondos destinados a inversión y desarrollo se sitúa por debajo del avance del PIB nominal en 2022 (10,1%). Es decir, de confirmarse la previsión, la inversión en conocimiento no habría conseguido incrementar su participación en el PIB. En realidad, podría incluso haber bajado una centésima, hasta situarse en el 1,42% del PIB. Una situación similar se produjo en 2021, ejercicio en el que se produjo un intenso aumento de la inversión, pero un avance muy limitado de la ratio I+D sobre PIB.
La Estrategia Española de Ciencia, Tecnología e Innovación establece el objetivo de situar la economía española en una inversión en I+D del 2,12% en el horizonte de 2027, avanzando en la convergencia con la Unión Europea-27. Según Fundación Cotec, esta meta «podría no alcanzarse incluso en el escenario de conseguir mantener en los próximos años un crecimiento anual de la inversión en la excepcional tasa de crecimiento del 9% que Cotec prevé para 2022».
Según los cálculos de la institución, que toman como referencia el escenario macroeconómico plurianual del Programa de Estabilidad de España, de mantenerse una tasa de crecimiento de la inversión en I+D del 9% en promedio anual hasta 2027, la ratio de I+D sobre PIB se situaría en el 1,71% en ese año, muy lejos del objetivo del 2,12% marcado por la Estrategia.
Para alcanzar el objetivo del 2,12% del PIB en 2027, sería necesario encadenar, a partir ya de este 2023, cinco tasas de crecimiento consecutivas de inversión en I+D muy superiores al 9%. En concreto, del 17,7% en promedio anual. En términos absolutos, sería necesario duplicar el volumen de inversión actual, añadiendo más de 17.000 millones de euros de inversión adicionales al sistema de ciencia e innovación, hasta alcanzar los 36.000 en 2027.
En todo caso, las proyecciones de la evolución del gasto por funciones consolidado de las Administraciones Públicas hasta 2026, incluidas en el Programa de Estabilidad de España 2023-2026, «no invitan al optimismo», sostiene Cotec que estima que no hay una previsión de suplir los fondos europeos con nuevos fondos nacionales en esa área de gasto público.
