Uvas rojas o verdes: ¿cuál es la mejor opción para tomar en Nochevieja?
La diferencia entre ambas opciones radica fundamentalmente en su contenido en antioxidantes específicos
En España, una de las tradiciones más arraigadas para recibir el Año Nuevo es comer doce uvas justo en los últimos 12 segundos del año, una por cada campanada que marca el reloj de la Puerta del Sol en Madrid.
La tradición se remonta al siglo XX y tiene que ver con un excedente de uvas en una temporada particularmente abundante en la región de Alicante en 1909. Para deshacerse del exceso, los agricultores sugirieron la idea de comerlas en la medianoche del 31 de diciembre, coincidiendo con las campanadas del reloj de la Puerta de Sol en Madrid.
Los beneficios de las uvas
Tomando uvas en Nochevieja se obedece a la tradición y además, se aprovechan los beneficios de tomar fruta. Ya sean rojas o verdes, ambas opciones tienen importantes beneficios para la salud.
Son una fuente natural de vitaminas, especialmente vitamina C, y contienen antioxidantes que pueden ayudar a proteger las células del daño causado por los radicales libres, lo que ayuda a prevenir enfermedades como el cáncer. Además, son ricas en fibra y minerales como el potasio, y su contenido de agua puede contribuir a una hidratación adecuada.
Su aporte en fibra hace que las uvas sean beneficiosas para la digestión. Esta fibra contribuye a mantener un sistema digestivo saludable y a prevenir problemas como el estreñimiento. Además, los polifenoles presentes en las uvas pueden promover la salud de la microbiota intestinal, mejorando así la salud del tracto digestivo.
La vitamina C presente en las uvas es fundamental para la formación de colágeno, lo que puede mantener una piel saludable y elástica. Los antioxidantes en las uvas también pueden proteger la piel del daño causado por la exposición a los rayos UV y otros factores ambientales.
¿Uvas rojas o verdes?
Las diferencias entre las uvas rojas y verdes generalmente radican en su contenido de antioxidantes específicos. Las uvas rojas tienden a tener un mayor contenido de antioxidantes como los flavonoides y resveratrol, que se ha sugerido que pueden tener beneficios para la salud cardiovascular y la reducción del riesgo de enfermedades relacionadas con la edad.
Sin embargo, las diferencias nutricionales entre las uvas rojas y verdes son relativamente pequeñas y ambas son excelentes opciones para una dieta saludable. La elección entre una u otra variedad puede depender más del gusto personal que de sus diferencias nutricionales significativas.
Sustitutos para los «haters» de las uvas
Para aquellos que no son muy fans de las uvas, existen otras opciones que pueden sustituir este alimento sin tener que renunciar por completo a la tradición.
Entre estas opciones destacan los lacasitos, las chuches, las aceitunas y las pasas.
Algunas recomendaciones para tomar las uvas en Nochevieja
- Cortar o pelar las uvas: para reducir el riesgo de atragantamiento, lo ideal es cortar las uvas por la mitad y quitarles la piel antes de consumirlas. Esto hace que sean más fáciles de masticar y tragar.
- Optar por uvas sin «pepitas»: la semilla en el interior puede aumentar el riesgo de sufrir atragantamientos. Lo mejor es optar por versiones más seguras como uvas sin pepitas, peladas y cortadas a la mitad.
- Supervisión con niños: si hay niños, hay que asegurarse de supervisarlos mientras consumen las uvas para evitar riesgos de asfixia.
- Alternativas seguras: si alguien tiene dificultades para tragar o simplemente prefiere no correr ningún riesgo, se pueden considerar alternativas seguras como uvas peladas, pasas, chucherías o trozos de frutas más blandas.
- Beber agua: hay que tener cerca un vaso de agua para ayudar en la ingesta y para facilitar la deglución, en caso de ser necesario.