Salen de la cueva de Arredondo (Cantabria) en buen estado los cuatro espeleólogos atrapados
El grupo ha aprovechado una bajada del caudal del río para continuar la ruta por sus propios medios
Los cuatro espeleólogos que permanecían atrapados en cueva Vallina (Arredondo, Cantabria) por la subida del caudal de agua han podido abandonar la cavidad por sus propios medios esta madrugada, pasadas las 01.30 horas, ha informado el Gobierno. El Ejecutivo estableció un operativo de rescate para acudir en su ayuda con la previsión de que se internaran en la cavidad tres equipos con diferentes misiones, aunque, finalmente, no ha sido necesaria la intervención de ninguno de ellos.
Los espeleólogos, que estaban explorando la cueva y elaborando cartografías, tenían previsto salir de la sima el sábado por la tarde y así se lo comunicaron al 112, por lo que el domingo por la mañana los servicios de emergencias del Ejecutivo iniciaron las movilizaciones para acudir en su ayuda.
Estas acciones coincidieron en el tiempo con la salida de tres de los deportistas que habían conseguido cruzar el río subterráneo y dar aviso de la situación de sus cuatro compañeros. Una vez informaron de lo ocurrido volvieron a internarse en la cueva para ayudar a sus compañeros sin éxito. El operativo de rescate, coordinado por técnicos de Protección Civil y Emergencias del Gobierno, se puso en marcha pasadas las 20.30 horas.
Como centro operativo se conformó un Puesto de Mando Avanzado (PMA) en la sede de la Federación Cántabra de Espeleología, en Arredondo, desde el que técnicos de rescate del Gobierno, efectivos de Cruz Roja, agentes del GREIM de la Guardia Civil y voluntarios de Protección Civil establecieron un plan de acción con tres incursiones en la cueva, las primeras para establecer un sistema de comunicaciones y una zona caliente con ropa seca y alimentos en el interior, y una tercera para llegar hasta los afectados y sacarles del punto en el que se encontraban. No obstante, la bajada del caudal del río ha permitido a los cuatro espeleólogos salir de la cavidad por sus propios medios.