Este es el parque de Madrid donde refugiarte del calor y que parece un oasis

Si alguien nos habla de un gran parque de situado en la capital de España, al instante todos pensamos en el Parque de El Retiro, lo que pocos saben es que los habitantes de Madrid tienen la suerte de poder disfrutar de otro parque que nada tiene que envidiarle. Se trata del parque de la Quinta de la Fuente del Berro, un fabuloso parque que cuenta con más de 13 hectáreas de extensión y conforma un auténtico oasis verde. Situado en el nº1 de la calle de Enrique D’Almonte, si quieres ir a conocer este vergel bastará con que cojas la línea 6 del metro y te bajes en la parada de O’ Donnell, ya que se encuentra a tan solo unos metros de la misma.

Debido a su gran extensión, de más de 13 hectáreas, el parque se encuentra delimitado por la calle de Enrique D’Almonte, donde se encuentra su entrada principal, la avenida de Alcalde Sáinz de Baranda y la M-30, llegando hasta la calle de Alcalá y el puente de Ventas siguiendo paralelo a la M-30 al unirse a los Jardines Sancho Dávila, con una extensión de más de 53.000 metros cuadrados.

Este parque se encuentra sobre los terrenos de que lo que hace años fue la Quinta de Miraflores, cuya construcción fue encargada por el monarca Felipe IV. Si paseas a lo largo y ancho de la Quinta de la Fuente del Berro, se pueden apreciar cascadas y estampas naturales que parecen propias de un cuento encantado. El parque ha pertenecido a varios pertenecido a varios propietarios distintos desde su construcción, y ha experimentado varias reformas a lo largo de los años. De hecho, durante el año 1900 fue utilizado como parque de atracciones.

Qué ver en Quinta de la Fuente del Berro

A pesar de ocupar 13 hectáreas, el parque de la Quinta de la Fuente del Berro es una joya escondida en el corazón de Madrid que pocos conocen. Sin embargo, este histórico parque cuenta con una exuberante vegetación, varios estanques, fuentes, desniveles, escaleras de piedra, cascadas y numerosas estatuas que lo convierten en un lugar ideal para alejarse del ritmo frenético de la ciudad sin necesidad de irse lejos.

El origen de este parque se remonta al siglo XVII, cuando fue creado por orden del rey Felipe IV como una finca de recreo para el disfrute de la nobleza madrileña. Su nombre proviene de una fuente natural que brotaba en la zona, conocida por sus propiedades curativas y su agua fresca y cristalina. A lo largo de los siglos, el parque ha sido testigo de diversos cambios y mejoras, aunque manteniendo siempre su esencia de refugio natural.

Si damos un paseo por su interior, podremos apreciar varias fuentes que no solo añaden un elemento de serenidad al paisaje, sino que también sirven de hogar para patos y peces, creando un gran ecosistema. También podremos observar una amplia variedad de árboles y plantas, incluyendo cedros, plataneros y tilos, que permiten a sus visitantes disfrutar de paseos a la sombra. A lo largo del parque, se pueden encontrar varias estatuas y monumentos que reflejan su rica historia y la cultura madrileña. Estos incluyen bustos de figuras literarias y artísticas, como el monumento dedicado al poeta Gustavo Adolfo Bécquer o la estatura del poeta ruso Pushkin, que añaden un toque de arte y cultura a la Quinta de la Fuente del Berro. Este parque además alberga un pequeño palacete rodeado de estanques, vestigio de su pasado noble.

Propietarios del parque

Han sido varios los dueños del parque de la Quinta de la Fuente del Berro ha lo largo de los años. En 1630, Felipe IV adquiere los terrenos que hoy conforman este parque por 32.000 ducados. Una década más tarde, en 1640, el parque es cedido a unos monjes benedictinos castellanos que habían sido expulsados del monasterio de Montserrat. Durante 1703, fue comprado por María Trimiño Vázquez de Coronado, que realizó grandes mejoras en el sistema de regadío. Y posteriormente, en 1780, cayó en manos de Martín Estenoz, que levantó la tapia que rodea al parque. En los años sucesivos pasó por numerosos propietarios hasta que el Ayuntamiento de Madrid comprara los terrenos del parque en el año 1948.

Horario de apertura del parque

El horario de apertura de este parque varía según la época del año en la que nos encontremos. Si tienes pensado visitarlo durante la temporada de primavera/verano, entre los meses de abril y septiembre el parque permanece abierto al público desde las 6:30 de la mañana hasta las 00:00 de la noche. Durante los meses de invierno el horario se restringe, ya que de octubre a marzo, aunque el horario de apertura se mantiene a las 6:30 horas, el parque de la Quinta de la Fuente del Berro cierra sus puertas a las 22:00 de la noche.

Este parque es mucho más que un simple espacio verde, ya que supone un punto de encuentro para los vecinos de la zona, que frecuentan el parque para hacer ejercicio, pasear y disfrutar de la naturaleza. La proximidad de colegios y centros culturales hace que se haya convertido en un lugar de referencia para organizar excursiones y actividades recreativas. El barrio que rodea el parque, conocido como Fuente del Berro, es una mezcla de arquitectura residencial clásica y moderna.