El Brexit vacía las estanterías de los supermercados británicos
La explicación a esta carencia se encuentra en una disputa económica. El fabricante Unilever exigió a la popular cadena de supermercados Tesco que le pagara un 10% más por sus productos. El argumento esgrimido es que la mayoría de ellos se producen en el extranjero y por tanto le resultan más caros tras la depreciación de la libra. La respuesta negativa de Tesco ya se hace notar, en un episodio que ha sido bautizado en el país como la ‘guerra del Marmite’, una pasta de levadura que se consume en muchos hogares británicos para desayunar. Algunos medios locales como The Guardian o BBC señalan que el mismo ultimátum de Unilever se extenderá a otros supermercados en las próximas semanas. Otras de las marcas afectadas son Flora, Comfort y Ben & Jerry’s.