Lamela deja en libertad con medidas cautelares a Pere Soler y César Puig

La jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela ha dejado en libertad con medidas cautelares, entre las que se encuentran comparecencias quincenales y la prohibición de salir de España, al exdirector de los Mossos d’Esquadra Pere Soler y al ex secretario de Interior César Puig. El fiscal había pedido para él una fianza de 100.000 euros a pagar en diez días. El teniente fiscal Miguel Ángel Carballo considera que existe riesgo de fuga y de reiteración delicitiva, según han informado fuentes jurídicas a EFE.

Pese a estos argumentos, Lamela ha decidido dejar a Soler y Puig en libertad con medidas cautelares, como ya hizo hace unas semanas con Josep Lluís Trapero.

Soler ha declarado este viernes como investigado durante dos horas y cuarto en el marco de la causa que investiga por sedición la actuación de los Mossos el 1-O. Ha acudido a la Audiencia Nacional acompañado de su abogado, del despacho de Cristóbal Martell, y no ha hecho declaraciones a los medios de comunicación.

En su declaración, ha defendido que él solo transmitió sus opiniones a Trapero y al resto de consejeros, ya que no era él quien dirigía los operativos policiales. Además, ha asumido las iniciativa de revisar las actas de comunicación entre los Mossos el 1-O, como reclamó la jueza en un auto.

Tras la comparecencia de Pere Soler ha llegado el turno del exsecretario de Interior César Puig,  segundo del exconsejero Joaquim Forn, que ha llegado a la Audiencia Nacional acompañado de su abogado Jaume Alonso Cuevillas, uno de los letrados en España del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, y tampoco ha hecho declaraciones.

La jueza llamó a declarar a estos dos nuevos investigados a petición de la Fiscalía, que hace unas semanas pidió ampliar la investigación por la inactividad de los Mossos d’Esquadra el día de la celebración del referéndum ilegal.

Carballo solicitó que se llamara a Soler y a Puig por su «decisiva actuación en los hechos objeto del procedimiento», que hasta el momento se había ceñido al asedio de la Guardia Civil el 20 de septiembre y ahora se extiende a los hechos ocurridos el 1 de octubre. El fiscal considera que la inacción de los Mossos «siguió la pauta anunciada previa y públicamente por los responsables políticos Joaquim Forn, Pere Soler Campins, director de los Mossos, y en la medida correspondiente César Puig».