Estas son las mejores alternativas a las uvas en Nochevieja: para niños y adultos
Gominolas, otro tipo de frutas o maíz dulce son opciones para quienes quieran formar también parte de las 12 campanadas
El fin de año trae consigo uno de los momentos más esperados y que más anécdotas suele dejar: las 12 uvas en Nochevieja. Es una costumbre muy antigua y, en muchos lugares, cada uva simboliza un deseo para el año que empieza. Aunque este es un momento especial para todas las personas de la familia, para los más pequeños también puede no disfrutarlo tanto por ser incapaces de comerse las uvas a tiempo. Esto puede ser o bien porque son demasiado grande o bien porque simplemente no les gusta esta fruta.
Es por ello que existen algunas opciones para poder continuar con esta tradición sin necesidad de comer las propias uvas. En The Objective te proponemos una serie de alternativas, algunas más y otras menos saludables, para todos los gustos.
Otras opciones a las uvas para Nochevieja
Algo importante a tener en cuenta, antes de elegir la alternativa a las uvas, la edad del niño. No solo por el valor nutricional que tenga la comida, sino también para evitar atragantamientos. Las opciones son:
- Frambuesas
Esta fruta es muy nutritiva y tiene un alto contenido de vitamina C; además, son ideales para los niños porque son suaves y fáciles de masticar. Esta opción es perfecta para comer otra fruta en sustitución de las uvas.
- Botones de chocolate
Esta es la mejor opción para los amantes del dulce; además, pueden ser de diferentes colores para que los que sean un poco más mayores puedan empezar el año con un festín de chocolate.
- Gajos de mandarinas
Esta alternativa es para aquellos niños a los que no les gustan las uvas pero son algo mayores. Lo ideal es asegurarse de que los gajos no tienen semillas para evitar sustos después, pero es una opción igualmente saludable.
- Mini nubes de gominola
Esta es otra opción perfecta para aquellos amantes del dulce que quieran entrar el nuevo año con algo diferente a las uvas. Eso sí, hay que asegurarse de coger siempre la versión mini o será imposible comer las 12.
- Pepitas de calabaza
Estas son muy fáciles de masticar y su tamaño es el perfecto para las bocas más pequeñas. Además, tienen omega 3, antioxidantes y minerales, por lo que puede ser un buen momento para empezar a introducirlas en la dieta.
- Garbanzos
Aunque puede sonar raro, los garbanzos son una buena opción de Nochevieja para aquellos niños que les gusten. Son suaves y fáciles de masticar, por lo que será fácil comerse los 12.
- Arándanos frescos
Esta es otra fruta que tiene un alto contenido en hierro y vitamina C. Son como pequeñas uvas que, además, tienen un gran sabor. Son una alternativa muy buena para que los pequeños de la casa puedan disfrutar de esta tradición sin vivir ningún susto.
Ya sean verdes o negras, esto es a elección de la persona. Por supuesto, tienen que ser sin hueso. De esta forma, podrán comerlas fácilmente y, además, son muy parecidas a las uvas por lo que a los niños les gustarán más.
- Cacahuetes cubiertos de chocolate (o similares)
Es una comida que tiene un aire festivo y, además, se mastica fácilmente. Suele estar entre los snacks favoritos de los niños, por lo que probablemente quieran seguir comiendo incluso después de las 12 campanadas.
- Su fruta preferida
En caso de que al niño no le guste ninguna de las frutas ya mencionadas, otra opción es coger su opción favorita y hacerla en 12 trozos pequeños, del mismo tamaño, y servirla como si fueran las uvas. Incluso es posible mezclar diferentes tipos.
- Maíz dulce
El maíz dulce amarillo, que se vende en conserva, es una gran alternativa a las uvas porque tiene un sabor delicioso que a muchos niños les encanta. Además, es tan saludable como las uvas.
- Cereales
Elegir entre sus cereales favoritos el que tiene el menor tamaño y servirle 12 granos es otra muy buena opción para que disfrute de las campanadas.
- Cubitos de queso
Si los niños adoran el queso disfrutarán comiéndolo también en fin de año. Es importante que todos los cubitos tengan el mismo tamaño y que, además, sean lo suficientemente pequeños para que los niños puedan metérselos en la boca.
- Gominolas
Para los niños más grandes y golosos las gominolas pueden ser un buen sustituto a las uvas. Tienen que ser pequeñas, eso sí, como los ositos o las bolitas de gominola.
- Un mix de todo
Una forma de hacerlo aún más divertido es que sean unas «uvas mix» y mezclar diferentes tipos de sustitutos.