Un Mel Gibson distante dejó frío al Festival de San Sebastián
En una crónica publicada en El País durante esa edición, cuentan que cuando llegó a San Sebastián no esperaba tal recibimiento: “Ante tanto griterío, Mel Gibson giró el rostro, se asombró y, sonriendo muy levemente, levantó la mano. ‘Me he emocionado, no esperaba una cosa así’, se le escuchó decir. ‘¿Es que les han pagado?’». La crónica prosigue: “Ante 3.000 entregados espectadores que le esperaban en Anoeta como si de un rockero se tratara, Gibson, con atuendo primoroso de traje, corbata y chalequillo, no fue capaz de emocionarse”. Sea como fuere, en esa ocasión presentó una de las películas clásicas ya del siglo XX, Braveheart, que obtuvo un gran reconocimiento por parte del público y de la crítica.
El Festival Internacional de Cine de San Sebastián cumple 64 ediciones, repasamos fotos para la historia del evento cinematográfico más importante de España. En la edición celebrada en 1995, Mel Gibson fue una de las estrellas más esperadas. Presentaba Braveheart, su -entonces- más reciente película. El gran y caluroso recibimiento que recibió el actor norteamericano contrastó con su actitud distante.
En una crónica publicada en El País durante esa edición, cuentan que cuando llegó a San Sebastián no esperaba tal recibimiento: “Ante tanto griterío, Mel Gibson giró el rostro, se asombró y, sonriendo muy levemente, levantó la mano. ‘Me he emocionado, no esperaba una cosa así’, se le escuchó decir. ‘¿Es que les han pagado?’». La crónica prosigue: “Ante 3.000 entregados espectadores que le esperaban en Anoeta como si de un rockero se tratara, Gibson, con atuendo primoroso de traje, corbata y chalequillo, no fue capaz de emocionarse”. Sea como fuere, en esa ocasión presentó una de las películas clásicas ya del siglo XX, Braveheart, que obtuvo un gran reconocimiento por parte del público y de la crítica.