'Los artistas: primeros trazos': la serie mexicana de María Dueñas aterriza en España
La afamada autora escribe una historia que cabalga entre la comedia, el thriller y el romance en su estreno en televisión
Dos guapos muy guapos se lanzan al delictivo mundo de la falsificación de obras de arte. Esa es la premisa de Los artistas: primeros trazos, la producción mexicana que acaba de aterrizar en España de la mano de Prime Video. Su creadora es la afamada autora española de best sellers María Dueñas, que firma con esta su primera serie de televisión original.
Los artistas: primeros trazos nos presenta a Yago (Maxi Iglesias), un anticuario, y a Cata (Ximena Romo), una experta en arte, que deciden aprovechar sus habilidades y conocimientos para estafar a millonarios vendiéndoles obras de arte falsas. El objetivo: salir de sus difíciles circunstancias económicas, mientras –cómo no– se van enamorando.
El sello de una primeriza
Producida originalmente para la plataforma de TelevisaUnivision, Vix, esta serie es una historia de María Dueñas, una novelista con gusanillo por los guiones. Ya adaptó a la televisión su exitoso libro El tiempo entre costuras, una adaptación que contó con el aplauso del público, pero también de la crítica especializada. Tal vez eso le impulsó a escribir una historia de cero, original, pensada solo para la pequeña pantalla. Con Los artistas: primeros trazos cumple ese deseo.
Ese deseo se traduce en buenas intenciones. Dueñas escribe una historia que cabalga entre la comedia, el thriller y el romance. Pero todo, eso sí, muy descafeinado. Aunque la serie nos ofrece una historia fresca y divertida, abarca tantos géneros y lo hace con tanta ambición, que a veces se queda corta. Los primeros episodios se hacen más amenos, pero mientras la historia va progresando, empieza a estancarse. La condición de primeriza de Dueñas en la serie queda patente en esta progresión a trompicones de la trama, que desluce una producción que no ha debido de ser barata, al rodarse entre Madrid, Marbella, Toledo y Miami.
Un elenco internacional
Destaca en esta producción, que –como hemos dicho– es ambiciosa, el elenco internacional que la conforma. En esta serie de origen mexicano –de hecho, al otro lado del charco se estrenó antes que en España–, hay varios acentos. Y eso siempre es de agradecer.
Los protagonistas son Maxi Iglesias y Ximena Romo –ella mucho más convincente que él en su papel, sin duda–, pero hay otros muchos actores que completan el casting. A pesar de que tiene dos protagonistas bien marcados, la serie es bastante coral. Hay caras tan reconocibles en España como Natalia Verbeke, Manolo Caro o Santi Millán, además de un buen plantel de actores latinoamericanos. Tal vez, lo mejor de esta serie sea, precisamente, su reparto de actores. Con algunas de sus interpretaciones, no todas, mantienen a flote una historia que por momentos flaquea.
Belleza y dinero en pantalla
Hay flaquezas en esta producción, sí, pero si hay algo que atrae al espectador es la exposición sin complejos de la belleza y el dinero. Lo que hace bien María Dueñas es retratar a esa jet set madrileña del barrio de Salamanca o del club de golf de La Herrería en San Lorenzo del Escorial. Resulta mucho más verosímil que la recreación del mundo del arte. Ambas cosas, en cualquier caso, extremadamente estereotipadas.
Hay algo de esa historia de Robin Hood de robar a los ricos para dar a los pobres –aunque ellos no le dan un duro a ningún pobre– que puede tener cierto hechizo. Ver a los ricos llevar una vida de ricos siempre es placentero. Además, la trama es fresca, aunque se estanque en el medio de la narración. No es la serie del año, pero para echar un rato y desconectar sirve de sobra. Eso sí, descubrirán por qué Maxi Iglesias todavía no ha ganado un Goya. Y no, no es por tener los ojos azules, como dijo en una entrevista.
