Estos son los tres ingredientes a evitar en la cocina para prevenir el moho de las ventanas
Aunque los detergentes suelen recomendarse para evitar la humedad su uso inadecuado puede empeorar la situación
La humedad en el hogar, especialmente en invierno, es un problema común que suele manifestarse en forma de condensación y moho en las ventanas. Aunque estos problemas parecen inevitables, se pueden gestionar con algunos ajustes sencillos en las prácticas de limpieza y ventilación. Irónicamente, ciertos ingredientes presentes en nuestras cocinas, que parecen inofensivos, pueden contribuir a que este problema se agrave.
Aunque ingredientes como el detergente, la sal y el vinagre tienen hueco en las baldas del armario destinado a los productos de limpieza que tenemos en casa, usarlos de manera incorrecta o descuidada puede generar la aparición moho. Por eso, es indispensable optar por trucos de limpieza clásicos.
¿Qué productos no debemos usar?
1. Detergente
Aunque los detergentes suelen recomendarse como solución para limpiar ventanas y evitar que la humedad se adhiera, su uso inadecuado puede empeorar la situación. Si se aplica sin hacer un aclarado posterior, el residuo del detergente puede acumular humedad, creando un ambiente favorable para la proliferación de moho.
Un truco más eficaz consiste en diluir una pequeña cantidad de detergente en agua y aplicarlo con un paño seco, asegurándose de eliminar cualquier exceso y dejando una capa protectora casi imperceptible en el vidrio.
2. Sal
La sal es conocida como un deshumidificador natural, ya que puede absorber el exceso de humedad en el aire. Sin embargo, la sal saturada puede comenzar a liberar humedad acumulada, contribuyendo a la condensación.
Si decides usar sal, colócala en recipientes cerrados con pequeñas aperturas y retírala en cuanto notes que está húmeda. También puedes usar bicarbonato de sodio, que tiene propiedades similares y es más eficiente.
3. Vinagre
El vinagre blanco contiene propiedades antifúngicas. Sin embargo, su mala aplicación puede convertirse en un problema. Si usas vinagre para limpiar ventanas, asegúrate de no empapar los marcos o sellos, ya que estos pueden absorber el exceso de líquido, que podrían provocar el crecimiento de moho.
El truco para eliminar el moho
Además de evitar el uso incorrecto de estos ingredientes, hay pasos prácticos que puedes seguir para reducir el riesgo de condensación y moho: el mejor consiste en abrir las ventanas al menos diez minutos al día ayuda a renovar el aire interior y reducir la humedad acumulada.
Así como limpiar regularmente los rieles y usar un deshumidificador eléctrico ayudan a erradicar el moho. También evitar secar la ropa húmeda en interiores.
¿Cómo afecta el moho a la salud?
El moho no solo afecta la estética de las ventanas, sino también a la salud de quienes habitan el lugar donde prolifera. Puede provocar alergias, irritaciones en las vías respiratorias y, en casos graves, infecciones en personas con el sistema inmunológico bajo.
Además, la humedad también daña los marcos de las ventanas y las paredes, aumentando los costes de mantenimiento de nuestra casa. Por lo que, prevenir el moho es una inversión no solo en la estética, sino también en la calidad de vida.