Ni en el frutero ni al sol: este es el truco para que los kiwis maduren
En España, el mejor momento para comerlos es entre octubre y noviembre, el resto de meses son importados
Kiwi. | Freepik
El kiwi, con su sabor inconfundible, es un invitado habitual en nuestras mesas. Sin embargo, esta deliciosa fruta requiere de una paciencia especial. A menudo, al adquirir kiwis, nos encontramos con ejemplares que necesitan varios días para alcanzar su punto óptimo de madurez, lo que puede resultar frustrante para aquellos que desean disfrutar de su sabor de inmediato.
¿Cómo saber si está maduro?
Para asegurarte de que tu kiwi esté en su punto justo de madurez, sigue este sencillo truco: presiona suavemente la fruta con tus dedos. Si la piel cede ligeramente, es señal de que está listo para ser consumido. Si por el contrario, el kiwi está duro como una piedra, puedes dejarlo unos días a temperatura ambiente para que madure.
¿Cómo hacerlos madurar?
La clave está en el etileno, un gas natural que liberan las frutas para madurar. Para acelerar este proceso, puedes seguir estos sencillos pasos:
- A temperatura ambiente: deja los kiwis a temperatura ambiente, pero evita la luz directa del sol.
- En papel de periódico: envuelve los kiwis en papel de periódico para crear un ambiente más cálido y húmedo.
- Con otras frutas: coloca los kiwis en una bolsa de papel junto con frutas como manzanas o plátanos. Estas frutas liberan etileno, acelerando la maduración de los kiwis.
¿Son de temporada?
Para disfrutar del auténtico sabor y textura del kiwi, es fundamental consumirlo en temporada. En España, la ventana de tiempo para saborear estos frutos en su punto óptimo es muy corta, concentrándose entre octubre y noviembre. Los kiwis que encontramos fuera de esta época, a menudo importados de otros continentes, pueden no alcanzar la misma calidad y frescura.
¿Qué beneficios tiene?
El kiwi es una fruta que destaca por su alto contenido en nutrientes esenciales para el organismo. Destaca por su aporte de vitamina C, superando incluso a las naranjas. Esta vitamina es fundamental para fortalecer el sistema inmunológico, proteger las células del daño y favorecer la absorción del hierro. Además, su contenido en fibra es considerable, lo que favorece el tránsito intestinal y previene el estreñimiento.
Antioxidante y protector cardiovascular
Los antioxidantes presentes en el kiwi, como la vitamina C y la vitamina E, combaten los radicales libres, protegiendo así las células del daño oxidativo. Esta propiedad antioxidante lo convierte en un aliado para prevenir enfermedades crónicas como el cáncer y las enfermedades cardiovasculares. Su contenido en potasio también contribuye a la salud cardiovascular, ayudando a regular la presión arterial.
Beneficios digestivos
El kiwi contiene actinidina, una enzima que facilita la digestión de las proteínas. Además de estos beneficios, el kiwi es una fuente de otras vitaminas y minerales como la vitamina K, el folato y el cobre. Su consumo regular puede contribuir a mejorar el estado de ánimo y reducir el riesgo de enfermedades respiratorias.
¿Cuál es la diferencia entre el verde y el amarillo?
El kiwi verde, el más común, se caracteriza por su piel marrón y rugosa y su pulpa de un intenso color verde. Su sabor es ligeramente ácido y refrescante, con una combinación de dulzor y acidez que lo hace muy apetecible.
Por su parte, el kiwi amarillo presenta una piel más fina y suave, de un color marrón más claro. Su pulpa es de un intenso color amarillo y su sabor es más dulce y menos ácido, con un toque suave y agradable.
