El truco infalible para quitar la cera de vela de la ropa sin estropearla
Con los métodos adecuados, es posible retirar la cera de vela sin dejar manchas ni deteriorar los tejidos de tus prendas
El truco para eliminar la cera de vela. | (Canva)
Encender velas crea una atmósfera acogedora, romántica o relajante, dependiendo del momento. Sin embargo, también puede conllevar pequeños accidentes domésticos, como el derrame de cera caliente sobre ropa, manteles o muebles. Cuando esto ocurre, lo primero que sentimos es pánico, y nos preguntamos si hemos perdido nuestra prenda para siempre.
La buena noticia es que eliminar cera de vela no tiene por qué convertirse en un drama. Con los métodos adecuados, es posible retirar la cera sin dejar manchas ni deteriorar los tejidos o materiales. En este artículo te contamos el truco infalible para quitar la cera de vela de la ropa, así como el procedimiento ideal para limpiar otras superficies.
El truco infalible para eliminar la cera de vela de la ropa
Cuando la cera caliente cae sobre la ropa, lo peor que puedes hacer es intentar retirarla de inmediato. La clave está en dejar que se enfríe por completo. Si es posible, coloca la prenda en el congelador durante unos 30 minutos, o aplica un cubito de hielo envuelto en una bolsa para endurecer la cera más rápido.
Una vez endurecida, retira con cuidado los restos más grandes usando una espátula plástica, el filo de una tarjeta o incluso con las uñas, siempre con movimientos suaves para no dañar las fibras. Después, coloca una hoja de papel absorbente, tanto por encima como por debajo de la mancha, y pasa la plancha sobre la zona. El calor hará que la cera restante se derrita y sea absorbida por el papel.
Para terminar, lava la prenda como lo harías normalmente. Si quedara algún residuo aceitoso, puedes aplicar unas gotas de alcohol isopropílico o quitamanchas específico antes del lavado. Este método no solo es efectivo, sino que conserva la integridad de la tela.
Cómo eliminarla de otras superficies
No solo la ropa sufre los estragos de una vela derramada: muebles, alfombras, suelos e incluso paredes pueden verse afectados. Aquí también es esencial actuar con calma y dejar que la cera se enfríe antes de intentar retirarla. En superficies duras como madera, vidrio o mármol, lo ideal es raspar suavemente la cera con una espátula de plástico o una tarjeta rígida.
Para eliminar el residuo que queda, aplica calor controlado con un secador de pelo, manteniéndolo a una distancia prudente. A medida que la cera se ablanda, límpiala con una toalla de papel absorbente. Si queda una marca aceitosa, puedes frotar suavemente con una mezcla de agua tibia y jabón neutro, o usar alcohol isopropílico si la superficie lo tolera.
En el caso de alfombras y tapizados, la técnica del papel y la plancha también funciona, pero debes tener aún más precaución. Utiliza una plancha a baja temperatura y siempre con papel protector entre la tela y el aparato. Si el tejido es delicado, puedes usar el secador de pelo como alternativa para derretir la cera y absorberla poco a poco con toallas de papel.
Para evitar futuros accidentes, utiliza portavelas y nunca las dejes encendidas sin supervisión. Así podrás disfrutar de su calidez sin preocupaciones y con la tranquilidad de saber que, si algo ocurre, tienes la solución perfecta a mano.
