Raúl Chapado (Federación de Atletismo): «Los presidentes no ganamos medallas»
El presidente de la Federación Española de Atletismo, recibe a THE OBJECTIVE tras el magnífico Europeo de Múnich
Raúl Chapado, presidente de la Federación Española de Atletismo, lo tiene claro. España acaba de cosechar unos grandes resultados en los Europeos de Múnich. Es exigente y, aunque se pone una nota alta, cree que el atletismo español tiene más potencial tanto en el presente actual como en el futuro.
PREGUNTA. ¿Se imaginaba volver con 10 medallas del Europeo? Dígame, con sinceridad, el número que había puesto en sus quinielas.
RESPUESTA. Nosotros ya logramos en Berlín estas 10 medallas y esperábamos estar en estos números. Creo que el atletismo español tiene más potencial, pensábamos que podíamos estar entre las 10 y las 13 medallas, pero hemos tenido lesiones y la mala suerte de María Pérez al ser descalificada en los 20 kilómetros marcha.
P. ¿Cómo afronta un presidente una cita como un Mundial, un Europeo o unos Juegos Olímpicos? Cuando sabe que no depende de usted...
R. Con ilusión, pero a la vez con incertidumbre. Los resultados no dependen de mí, ni siquiera de los atletas, porque hay otros atletas de otros países que también compiten. La gente se fija sólo en las medallas, pero hay muchos otros atletas que trabajan y acuden para mejorar sus marcas, sus objetivos…
P. Es un puesto muy ingrato, ¿no? Si hacen un buen papel, se destaca su gestión… si fallan, el presidente es el culpable de todo.
R. Yo reconozco que soy un privilegiado, estoy trabajando en lo que es mi pasión. Los presidentes no ganamos medallas, y cuando entras en un cargo como este ya lo sabes. Son los atletas con sus preparadores, con mucho esfuerzo y sacrificio quienes lo hacen. Nuestro trabajo es intentar hacerles lo más fácil y mejor posible su trabajo, crear un tejido deportivo, lograr ayudas y financiación. Intentar conseguir que más aficionados acudan a verles…
«Recibo mensajes incómodos incluso cuando las cosas van bien»
P. ¿Recibe mensajes incómodos cuando las cosas no van bien?
R. Es ley de vida, e incluso cuando las cosas van bien recibes mensajes incómodos en redes sociales. Como digo, es ley de vida, lo que antes se quedaba en un comentario de café ahora ha cambiado. Hay que aceptarlo, entender esta diversidad de pensamiento, pero no todo el mundo que opina tiene la razón. Creo que debemos aceptar las críticas pero siempre que sean además con un mínimo respeto.
P. ¿Cómo piensa celebrar esta gesta? ¿Tenía alguna promesa hecha?
R. Para nosotros, el éxito no se reduce sólo al Europeo, también hemos tenido el Mundial y ha habido citas muy importantes en categorías inferiores. La forma de celebrarlo es intentar mejorar las condiciones de trabajo de los atletas y sus entrenadores. Hablar con el Gobierno, patrocinadores… y siempre te atienden mejor cuando logras buenos resultados.
«Soy un hombre de proyectos, no de permanencias»
P. ¿Por qué acaba Raúl Chapado como presidente de la Federación de Atletismo?
R. Buena pregunta, porque nunca me había planteado poder llegar a este cargo. Una vez que acabé mi etapa en las candidaturas olímpicas, algo a lo que dediqué toda mi vida profesional, fue cuando José María Odriozola anuncia que no se iba a presentar más a la presidencia de la Federación de Atletismo.
Entonces, hubo gente que me lo planteó. Inicialmente no me veía, pero hay un momento en el que me lo planteo y doy el paso. Y aquí estaré, dentro de la limitación de mandatos que propuse a la Asamblea nada más llegar. Aquí estaré mientras tenga fuerzas y la Asamblea así lo quiera. Y si no, me marcharé. Soy un hombre de proyectos, no de permanencias.
P. ¿Hay todavía gente que le compara con Odriozola, su antecesor y que estuvo cerca de 30 años en el cargo?
R. Personalmente no, lo que sí hacen a veces es comparar las gestiones, pero son totalmente distintas. Cuando ellos estuvieron aquí, los 27 años que ha estado Odriozola en el cargo, lo hicieron conforme al ecosistema que existía entonces. Y nosotros lo hacemos ahora con otro totalmente distinto, con las nuevas tecnologías, medios de comunicación, el rendimiento de los deportistas. Tienes que adaptarte. Antes era posiblemente más permanente, más tranquilo, ahora todo va cambiando cada momento. ¿Quién iba a pensar que íbamos a tener una pandemia, un volcán, una guerra? Vamos a una velocidad de vértigo.
«Soy exigente, por eso pongo un notable alto, aunque estamos cerca del sobresaliente»
P. Vayamos a lo más reciente: 10 medallas y tercero en el medallero ¿Qué nota se pone?
R. Tenemos que tener en cuenta, además, que hemos tenido siete cuartos puestos, que han faltado grandes figuras como, por ejemplo, Ana Peleteiro. Tengo la sensación de que lo hemos hecho muy bien, pero el atletismo español tiene más potencial. Soy exigente y por eso pongo un notable alto; aunque, teniendo en cuenta todo lo que ha rodeado al Europeo, estamos más cerca del sobresaliente.
«Si me tengo que quedar una medalla es la de Miguel Ángel López»
P. Dígame, en confianza, qué medalla ha sido la que mejor le ha sabido.
R. Todas, fíjate en cómo se han conseguido la de Asier o Mariano García. Pero si me tengo que quedar con alguna, esa es la de Miguel Ángel López en 20 kilómetros marcha. Después de siete años, con todo lo que ha trabajado, verle otra vez arriba me reconforta porque sé lo duro que es el atletismo, y que vuelva a sentirse feliz. Pero de verdad que me he alegrado por todas, incluso por aquellos que no la han podido conseguir.
P. ¿Por qué son tan especiales el oro de Mariano García y el de Asier Martínez?
R. Porque los dos son gente joven, con un extraordinario rendimiento. Y luego, fíjate en cómo las han conseguido. Asier, por apenas una milésima. Y lo de Mariano es inexplicable. Estábamos todos apoyándole para que sus piernas no se pararan. Todo el mundo le estaba alentando. Y cómo la consigue, ganando a un oro mundialista en 1500, Jake Wightman.
«Por circunstancias, hemos estado por debajo del nivel en el apartado femenino»
P. Somos una potencia en maratón, marcha, 1500, 110 metros vallas u 800, pero, ¿qué sucede en el resto?
R. Como te decía antes, no olvidemos que no hemos podido contar con Ana Peleteiro. En longitud, Eusebio Cáceres ha quedado cuarto; en triple santo, hemos sido quintos. En velocidad ha sido espectacular, los relevos. Somos uno de los países en Europa con mejores resultados globalmente y eso nos sitúa ahora mismo entre los terceros o cuartos de Europa y entre el diez u once del mundo. Además, está el caso de Jordán Díaz, que tiene la nacionalidad española pero que todavía no ha podido competir. Cuando lo haga será otra opción.
María Vicente, de triple salto, lleva un año plagado de lesiones. Está claro que no somos buenos en todas las modalidades, pero para eso tenemos que seguir trabajando.
P. De las 10 medallas, salvo maratón femenina y la plata de Raquel Baena en 35 km marcha, el resto han sido masculinas. ¿Le preocupa?
R. En este Europeo tenemos el caso de María Vicente. No me cabe duda que es una de las atletas ahora mismo que más nivel tiene, si hubiera sido por la técnica en la marcha irregular. Son circunstancias que pasan. Sara Gallego ha acabado cuarta en los 400 metros vallas, también en los relevos hemos acabado cuartos. Por circunstancias, hemos estado por debajo, pero tenemos un gran potencial, aunque hay que seguir creciendo. Hay que aceptarlo.
P. Parece que el presente está asegurado en el atletismo español, ¿y el futuro?
R. Hemos venido de hacer los mejores campeonatos sub-18, hemos ido al Mundial sub-20 de Cali. Lo que está claro que es que, a partir de ahora, conseguir una medalla va a ser muy difícil. Porque el atletismo es talento y están emergiendo un gran número de países con este talento. Antes, Europa lograba entre 60 y 75 medallas en las grandes citas, ahora no llega a más de 30. Es verdad que en Cali no hemos logrado ninguna medalla pero sólo Estados Unidos nos ha superado en número de finalistas.
«Yo fijé el límite de los tres mandatos. Es una cuestión de energías»
P. En diciembre cumple seis años de su mandato. Usted quiso fijar un número de mandatos en la Federación de Atletismo. ¿Cuándo finalizaría el suyo?
R. Ahora mismo, estamos en el segundo mandato hasta las siguientes elecciones, que serán una vez pasen los Juegos de París del 2024, tal y como establece la ley. Cuando yo llegué al cargo, lo primero que hice fue fijar un máximo de tres mandatos. No es una cosa ni de legalidad, ni de estética. Es una cuestión de energías. Estamos en un cargo que desgasta mucho, que exige mucho esfuerzo. Mi fecha de finalización es 2024. Será entonces la Asamblea quien decida. Y si continúo, será como máximo hasta después de Los Ángeles 2028.
P. ¿Y luego, qué?
R. Seguir disfrutando del atletismo de forma más tranquila, porque ahora mismo profesionalmente no puedes hacer planes a futuro, a largo plazo. Hay que vivir el día a día. Nunca pensé que trabajaría en dos candidaturas olímpicas, que sería presidente de la Federación Española de Atletismo. La vida te va llevando.