El Atlético cae cruelmente fallando un penalti en el último minuto y jugará la Europa League (2-2)
El club rojiblanco se quedó sin su sueño ‘Champions’, de manera temprana y dura, en ese penalti que apareció como salvador y se convirtió en dolor eterno
El Atlético de Madrid empató (2-2) este miércoles ante el Bayer Leverkusen en la quinta jornada de la Liga de Campeones y se quedó sin opciones de llegar a octavos de final, un amargo adiós que pudo evitar Yannick Carrasco con un penalti en el minuto 98.
El equipo de Diego Pablo Simeone dependía de sí mismo, pero la goleada (0-4) del Oporto al Brujas dejó claros los deberes en el Cívitas Metropolitano. El Atleti fue valiente, jugó al ataque y tuvo sus ocasiones, pero regaló en los dos goles y no tuvo gasolina para el arreón final con el que evitar la eliminación.
No hubo la épica de otras veces, fue algo más allá. La fe rojiblanca resucitó incluso con el pitido final, ya que en la última jugada, el árbitro pidió a los jugadores que no se retiraran por un posible penalti. Clément Turpin señaló la infracción de Hincapié y Carrasco se pidió el lanzamiento que detuvo el meta rival, después Saúl mandó el rechace al larguero y Reinildo también falló.
Un disgusto de ‘Champions’, tan cerca, pero tan lejos. El Metropolitano había recibido a los suyos con ambiente de noche grande y los jugadores apretaron. Sin embargo, el ganar o ganar subió las pulsaciones rojiblancas y precipitó el juego local, además de provocar un par de errores que castigó el Bayer con dos goles.
A los nueve minutos, Griezmann intentó sacar el balón con un caño, y el robó alemán se tradujo en el 0-1 de Moussa Diaby. El Atlético, con un once ofensivo, no se descompuso y reaccionó con el 1-1 cerca del minuto 20. La combinación entre el galo y Correa la finiquitó Carrasco con un gran disparo pegado al poste (1-1).
El Atlético resucitó en un momento de posesión, pero el Bayer volvió a rascar de su presión arriba, con el robo esta vez a Correa en la frontal para el gol de Hundson-Odoi. La noche se vistió de Halloween y aún pudo ser peor para los del ‘Cholo’ con las contras peligrosas de un Bayer con las ideas mucho más claras.
El adiós más duro
Oblak tuvo que salvar un mano a mano y Simeone vio la necesidad de cortar esas acciones del equipo de Xabi Alonso, sin dejar de buscar el gol. Rodrigo De Paul y Saúl Ñíguez fue el doble cambio rojiblanco, que dio presencia en el centro del campo a los locales.
Los cambios que siempre dan que hablar con Simeone, dieron la razón al técnico argentino con el tanto de De Paul en el minuto 50. El Atlético volvió a atacar con mucha gente, con gran salida de Molina, en busca de aprovechar su momento espoleado por su público. Griezmann tuvo la más clara pero disparó centrado.
La tormenta rojiblanca dio paso a minutos de recuperar el aliento. Se calmó el ritmo y el Bayer la tuvo a la contra por medio de Diaby, algo escorado en su disparo contra el pecho de Oblak. La cuenta atrás, con la Champions en juego, se puso cuesta arriba para los del ‘Cholo’ porque el meta esloveno pasó a ser el mejor.
Una mano dura abajo evitó el tanto alemán mientras Griezmann acaparaba las acciones locales. La última bala fue la de Joao Félix, con poco más de cinco minutos, pero el portugués apenas tocó un par de balones, lejos de la meta rival. El Atlético se quedó sin su sueño ‘Champions’, de manera temprana y dura, en ese penalti que apareció como salvador y se convirtió en dolor eterno. Atlético y Bayer tratarán en la última jornada de ser terceros (Liga Europa).