Vinicius comienza de nuevo: el Balón de Oro que pudo ser y no fue
Tras la mayúscula sorpresa vivida la noche del lunes en París, el brasileño promete reunir méritos «diez veces» más
Es el momento de entonar el mea culpa. Un arrepentimiento basado en dar por hecho que Vinícius Júnior era el hombre destinado a ganar el Balón de Oro. Una afirmación repetida hasta la saciedad en las últimas semanas —por mí el primero—, sustentada, eso sí, en las filtraciones que habían recibido tanto el Real Madrid como el propio futbolista brasileño.
De no haber sido de este modo, el Real Madrid no habría fletado un vuelo con 50 VIPS que finalmente fue suspendido cuando la entidad merengue recibió el chivatazo de que Vini no ganaría la pelota dorada como mejor jugador de la temporada. En ese preciso instante la indignación se desató en Valdebebas y los teléfonos comenzaron a arder.
Ya daba igual que Ancelotti o la institución pudieran ser premiados como mejor entrenador y mejor equipo de la 23-24 (como así fue). Paso a relatarles los motivos por los que el Real Madrid decidió dar plantón a France Fútbol y la UEFA en la ceremonia del Balón de Oro.
«Nos han faltado al respeto»
Al principio no podía creerlo, pero cuando el rumor de que el Madrid no se subía al vuelo con dirección a París empezaba a correr como la pólvora, traté de recabar información para comprobar su verosimilitud. De inmediato me encontré con un club en estado de shock y varios mensajes claros.
Para comenzar, el Real Madrid considera que en toda esta historia «se le ha faltado al respeto» y, por tanto, la institución «no iba a acudir allí donde no se sentía respetada». Con respecto a Vinicius me transmitieron que se encontraba «sorprendido y decepcionado», y en relación con Carvajal, «que el defensa no entendía absolutamente nada».
En Concha Espina no logran comprender como Vini no se llevó el Balón de Oro, pero aún menos los criterios por los que Dani Carvajal no fue la siguiente opción en lugar de Rodri. Según estos preceptos, lo primero que se tiene en cuenta son las actuaciones decisivas, lo siguiente los títulos y por último el juego limpio.
Si Dani ganó lo mismo que Rodri, pero además hay que sumarle el trofeo de la Champions (en la que justo se cargan al City) y donde también marcó el gol que abrió el marcador en la final, no parece muy lógico que fuera aventajado por el pupilo de Guardiola.
No les voy a ocultar que en el ambiente «mosquea» que, por primera vez, la UEFA se incorporara a la organización de dicho galardón. Ahí lo dejo.
Rodri no es el culpable
Es importante dejar claro que nadie en el Madrid piensa que Rodri no sea un fantástico futbolista. Comenzando por el propio Carvajal, que se alegra de corazón por su amigo y que fue de los primeros en llamar por teléfono al mediocampista para felicitarle, como así reconoció el nombrado mejor futbolista del momento: «he recibido una llamada de él alegrándose por mí. Me he querido acordar de Carvajal porque, sinceramente, creo que también lo ha merecido».
Esto no quita para que Dani, «que daba por hecho que lo ganaba Vini», se quedara con la sensación de haberlo ameritado tanto o más que Rodri, dados los criterios de votación por los que se han regido los 100 periodistas pertenecientes a las 100 primeras federaciones del ranking futbolístico mundial.
Sea como sea, Rodri hace historia tras ganar el primer Balón de Oro para España 64 años después de que lo recogiera Luis Suárez Miramontes.
Vini no se rinde
Vini ha mostrado dos actitudes bien diferenciadas en estas siete temporadas desde que viste la camiseta del Real Madrid. Una más sensible en la que se muestra afectado por las vejaciones recibidas desde la grada (sobre todo si son de índole racista), y otra más combativa e impermeable cuando los ataques se refieren a su desempeño deportivo.
El lunes por la noche, nada más entregarse el premio, el canarinho puso el siguiente tuit: «Lo haré diez veces si es necesario. No están preparados». Toda una declaración de intenciones encaminada a no rendirse en su infatigable búsqueda del Balón de Oro.
Primera parada: Mestalla. Con todos los matices que esta visita conlleva…