El Rey inaugura el Mobile de Barcelona sin visita institucional y con la feria a medio gas

Después de dos años de restricciones por la pandemia, el Mobile World Congress (MWC) empieza este lunes en Barcelona con la meta inmediata de volver a la normalidad y con la idea de poder sobrevivir en el mediano plazo (en estos momentos se negocia una renovación). Sin embargo, en su primera jornada de la edición de 2022 ninguno de estos dos objetivos se está cumpliendo: la asistencia a la feria es irregular y del nuevo contrato no hay ninguna noticia.

Y es que, pese a los esfuerzos de la GSMA y el empuje que han puesto las operadoras de telecomunicaciones -organizadoras del evento- este lunes se ha constatado que faltan muchas cosas para volver a la ansiada normalidad. 

En primer lugar, el Rey ha inaugurado el MWC sin baño de masas y sin realizar su tradicional paseíllo por la feria. Sobre las 9.30 de la mañana llegó al recinto de la Fira, pero se trasladó inmediatamente a una reunión de cerca de una hora con Pedro Sánchez y los organizadores y compañías de la GSMA. 

Paseíllo del Rey

Hasta 2019 el paseo del Rey solía ser uno de los puntos fuertes del primer día del MWC. Por espacio de media hora se detenía en los stand de las compañías más importantes y del pabellón de España. En esta oportunidad, y al igual que en 2021, se han argumentado razones Covid para suprimir este acto.

Por otro lado, la asistencia está siendo peor de la esperada. A primera hora de la mañana la asistencia era muy irregular y la entrada a los pabellones de la Fira se podía hacer con relativa facilidad. Sobre el mediodía ha ido entrando más gente, pero la sensación es que la asistencia en esta primera jornada es equivalente a la del último día de ediciones anteriores, donde mucha gente ya se había marchado.

El objetivo era que al menos 60.000 personas asistan este año, la mitad de los 109.000 que lo hicieron en el último gran año antes de la Covid. Sin embargo, los ríos de gente caminando por los pasillos y las filas de asistentes esperando a entrar a los pabellones más interactivos, brillan por su ausencia. 

Espacios holgados

Y todo ello pese a que la disposición de los espacios es sumamente holgada, con pabellones gigantes para cada empresa y con enormes pasillos que rodean todos los espacios para generar una sensación de que hay más aforo. Es evidente que vienen muchas menos empresas que hace tres años, pese a que la organización ha confirmado que el 95% de éstas lo hacen en formato presencial. 

También hay muchos más espacios para comer con amplios comedores que nunca se habían visto, debido a que en ediciones anteriores había una demanda mucho mayor por acudir a la feria que los espacios efectivamente disponibles.

Los kilométricos atascos de Barcelona durante el MWC solo se han producido a primera hora de la mañana, pero lejos del infierno que se producía en ediciones anteriores, donde había que reservar al menos una hora para intentar llegar a tiempo al recinto de la Fira. 

Inauguración de Pallete

Desde el punto de vista de los contenidos, el MWC de 2022 lo inauguró el presidente de Telefónica -en su condición de presidente de la junta de la GSMA- y Nick Read, presidente de Vodafone. 

Durante su intervención Pallete ha vuelto a pedir equidad en las reglas del juego entre operadoras de telecomunicaciones y empresas tecnológicas. Un nuevo mensaje a los reguladores españoles y europeos, muchos de los cuales asistirán estos días al Mobile de Barcelona.

«Respetamos a todos los actores de la nueva economía. Pero nosotros también merecemos respeto. Es imposible afrontar los nuevos tiempos con las viejas normas. Nuestro sector no pide privilegios, sino justicia». «El tráfico de datos crece hasta un 50% anual. El reto de la inversión es enorme y merece especial atención. La carga de la inversión necesaria para gestionar este creciente volumen de tráfico debe recaer de forma justa», ha argumentado.

Nick Read

Nick Read ha coincidido con Pallete en su solicitud a los reguladores para cambiar las reglas del sector «Necesitamos colaborar, que los reguladores se unan a nosotros», ha asegurado. El ejecutivo de Vodafone ha reivindicado el papel de España, de quien ha reconocido los pasos dados tanto a nivel regulatorio como fiscal para el trabajo de las operadoras de telecomunicaciones. 

Es verdad que el presidente de Vodafone ha agradecido la colaboración del Gobierno español, pero ha advertido que aún queda mucho por hacer. «o es ningún secreto que aún queda mucho por hacer para abordar la fragmentación del mercado. En España y en toda Europa, dependerá de los operadores, el gobierno y la Comisión Europea encontrar la solución adecuada».