Duro Felguera pierde a su directivo estrella de renovables solo tres meses después de ficharle
Emilio Martín era el eje de la nueva estrategia verde de la ingeniería, que a su vez era la principal apuesta del plan de viabilidad para 2027
Sede de Duro Felguera, en una imagen de archivo. | AGENCIAS
Cambios en Duro Felguera. Emilio Martín, uno de los recientes fichajes del consejero delegado, Jaime Argüelles, y llamado a pilotar el desembarco en el sector de renovables, ha abandonado la compañía. Según ha confirmado THE OBJECTIVE el directivo ha salido de la empresa asturiana a mediados de semana de común acuerdo con la dirección y, por ahora, se desconoce su sustituto.
Emilio Martín fue designado en enero como director de DF Green Tech, la filial creada por la compañía de ingeniería asturiana para aprovechar las oportunidades de la transición energética con el desarrollo de la eólica, la solar, el hidrógeno verde y los sistemas de almacenamiento energético.
Martín era el eje de la nueva estrategia verde de Duro Felguera, que a su vez era la principal apuesta del plan para multiplicar la facturación casi por nueve en 2027. La compañía ha declinado hacer comentarios respecto de este movimiento al ser consultada por este medio.
Cambios en el Consejo
Martín es ingeniero informático por la Universidad de Sevilla y tras pasar por Telefónica y Oracle se incorporó en 2000 a la compañía de renovables Abengoa como responsable de tecnologías de la información. Dentro de la compañía andaluza fue director ejecutivo de las filiales americanas Abencs y Abengoa Proyects Warehouse y dejó de mutuo acuerdo el grupo en 2016 después de que la compañía presentara su primer preconcurso de acreedores.
En los últimos años trabajó como director ejecutivo en la compañía de renovables Quintas Energy y como director de Estrategia en el grupo de telecomunicaciones PITMA. De momento, se desconoce su nuevo destino.
La salida de Martín coincide con recientes cambios en el Consejo de Administración. El pasado miércoles se nombró a José Massa Gutiérrez como nuevo vicepresidente del máximo organismo de Duro Felguera, un cargo que estaba vacante desde el año 2019. Una designación que se produje solo dos meses después de la llegada de Jesús Sánchez-Lambás como secretario del máximo órgano de la compañía asturiana en sustitución de Bernardo Gutiérrez, fundador y consejero delegado del despacho jurídico Ontier.
Plan de viabilidad 2027
Un nombramiento cuestionado y en claro conflicto de intereses ya que Sánchez-Lambás es socio director del despacho A25 Abogados y Economistas y emplea en su bufete a Valeriano Gómez como asesor. Gómez, exministro de Trabajo de José Luis Rodríguez Zapatero, es desde enero de 2020 miembro del consejo de administración de Duro Felguera.
Volviendo al plan estratégico, en enero se anunció la nueva estructura de la compañía con cinco nuevas áreas de negocio: Energía Convencional, Plantas Industriales, Servicios, Energías Renovables y Sistemas Inteligentes. El objetivo era potenciar la especialización y la orientación a proyectos tanto en los negocios tradicionales como en los más innovadores, como son los de energías renovables, almacenamiento de energías, hidrógeno y sistemas inteligentes.
Una nueva estructura en el marco del plan de viabilidad 2027 de Duro Felguera que buscaba aumentar su facturación hasta los 750 millones de euros en 2027, frente a los 84,5 millones del año pasado. Para 2024, estima 500 millones de ventas. El plan fue aprobado por la SEPI a finales del año pasado, lo que le permitió liberar la segunda parte de su rescate público.
Resultados de 2021
En noviembre recibieron 80 millones del Fondo de Apoyo y Solvencia a las Empresas Estratégicas (FASEE). Sin embargo, la SEPI desembolsó la totalidad del montante como préstamo participativo en lugar de haber entregado 30 millones como capital y 50 millones como préstamo participativo. Ello, porque no ha entrado un socio industrial como pedía la sociedad pública. Esto se sumó a los 40 millones que se liberaron en marzo del año pasado.
Sin embargo, pese al rescate público, las cuentas de Duro Felguera no terminan de mejorar. En los últimos resultados anuales se reflejó que la compañía redujo su facturación desde los 133,1 millones a los 84,4 millones de euros. Pese a que su Ebitda y su Edit ha mejorado considerablemente hasta los 9,1 millones y los 16,8 millones negativos, respectivamente, la asturiana ha necesitado consolidar el rescate público para entrar en beneficios.
«Como consecuencia de esta operación de refinanciación, la compañía ha registrado un resultado financiero extraordinario positivo por importe de 37 millones de euros netos de costes asociados a la operación de refinanciación, permitiendo alcanzar una cifra de beneficios después de impuestos (BDI) en el año 2021 por importe de 22,6 millones de euros», reconoció Duro Felguera en sus resultados anuales.
En cuanto a contratación, la situación se ha salvado exclusivamente gracias a la adjudicación de un proyecto en Países Bajos por importe de 100 millones de euros, consistente en la rehabilitación y reparación de las instalaciones de un cliente industrial. De esta manera, se alcanzó una cifra total de contratación en 2021 de 175,1 millones de euros, frente a los 78,6 millones de 2020. Sin Países Bajos la contratación hubiese caído levemente.
