Plan de pensiones: todo lo que debes saber sobre este método de ahorro y alternativas
Los beneficios de un fondo de pensiones han ido mermando en los últimos años, pues cada vez se reduce más el límite que se puede desgravar en los planes individuales
Según se va acercando la edad de jubilación toca pensar en qué tipo de vida queremos tener cuando dejemos de trabajar. Hasta hace un tiempo, dejar el futuro en manos de un buen plan de pensiones parecía la mejor opción. Así, ahorrabas una cantidad de dinero al año y luego cuando hacías la declaración de Hacienda podías, incluso, desgravar una parte de las aportaciones. Sin embargo, sus beneficios han ido mermando en los últimos años, pues cada vez se reduce más el límite que se puede desgravar en los planes de pensiones individuales.
El Gobierno ha limitado recientemente la cantidad anual que podemos aportar a un plan de pensiones privado, de tal manera que se reducen las posibilidades de aportación que cada uno quiera hacer al plan en función de sus posibilidades. Esto supone un factor positivo si se tiene en cuenta que contribuye a que exista una libertad financiera.
Inversión inmobiliaria antes que un plan de pensiones
Los expertos consideran que, en lo que a planes de pensiones se refiere, la clave es aportar lo mínimo, pues nunca sabes con certeza si vas a poder recuperarlo. Además, puestos a ahorrar para el futuro, recomiendan antes buscar la forma de revalorizar el dinero a través de inversiones, como puede ser en una señal de una casa, la bolsa o las criptomonedas, que, además de aportar beneficios a tiempo real, existe la posibilidad de que se revaloriza de cara al futuro.
Un mayor esfuerzo de ahorro y contención hoy, a través de cualquiera de las medidas mencionadas, va a traducirse en una mayor calidad de vida durante la jubilación.
Plan de pensiones de empresa
Los planes de empresa son fondos de pensiones promovidos dentro de una empresa o una administración pública en beneficio de sus trabajadores. En cuanto a sus ventajas, encontramos principalmente una: menos comisiones. Los planes de empleo tienen unas comisiones inferiores a las de los planes de pensiones individuales y estos costes reducidos se traducen en un mejor rentabilidad. Además, para ofrecer unas garantías totales, estos planes de pensiones requieren la constitución de una Comisión de Control que supervisa su funcionamiento.
Al igual que los planes de pensiones individuales, permiten aportaciones voluntarias y se podrá elegir la forma de cobro de las prestaciones cuando el beneficiario se jubile, ya sea a modo de renta mensual, en forma de capital en un único pago o bien un sistema mixto de renta y capital. Asimismo, las aportaciones realizadas pueden descontarse de la base imponible del IRPF hasta un límite de 8.000 euros al año. Sin embargo, desde el punto de vistade la ventaja fiscal siempre es mejor un plan de empleo ofrecido por tu empresa, tu sector o tu asociación de autónomos.
Cabe siempre recordar que, a la hora de contratar un plan de pensiones, es fundamental tener en cuenta el tipo de plan, su capacidad de ahorro, las ventajas fiscales y la liquidez.
¿Cómo se calcula la pensión en España?
Desde verano del pasado año 2021, en nuestro país, se encuentra en vigor una normativa que vincula las pensiones con el IPC (Índice de Precios al Consumo), utilizando para ello la media de crecida de los precios entre diciembre del año anterior y noviembre del año vigente. Esto quiere decir que la subida del 2,5% que se experimenta este año viene determinada por el aumento del coste de vida entre diciembre de 2020 y noviembre de 2021.
En España, el organismo encargado de gestionar el sistema público de pensiones es la Seguridad Social. Todos los trabajadores en activo contribuyen a hacer caja mediante el pago de cotizaciones, de tal manera que los actuales sufragan las pensiones de aquellos ya jubilados para que, en un futuro, se vean beneficiados del trabajo de las siguientes generaciones.
La cuantía de la pensión irá en función de lo que se haya aportado económicamente a la Seguridad Social a lo largo de la vida laboral, lo que significa que, a mayor cotización, mayor pago de cuotas y, en consecuencia, mayor pensión. La cantidad final de las pensiones de los españoles va a depender, además, de la edad de jubilación y de los años trabajados y va a funcionar a modo de porcentaje.