Western Gate, minoritario de DIA, carga contra el 'súper' por excluirle de la toma de decisiones
Los accionistas minoritarios piden a la empresa nombrar un consejero, lo que garantizaría la representación de sus intereses
Western Gate Private Investments Limited, el family office de Luis Amaral que invierte en empresas privadas y cotizadas, vuelve a cargar contra LetterOne, propietario del 77% del capital de DIA al considerar que la empresa excluye a los minoritarios de la toma de decisiones.
Esta semana el Grupo DIA celebraba en su sede central de Madrid su Junta General Ordinaria de Accionistas. El presidente ejecutivo de la compañía, Stephan DuCharme, aprovechó la cita para destacar el avance en el profundo plan de transformación que está haciendo el grupo. Durante la misma se aprobó precisamente la reelección de DuCharme como consejero ejecutivo de la compañía. Asimismo, también salió adelante el nombramiento de Gloria Hernández como nueva consejera independiente.
Sin embargo, desde Western Gate, que ostenta el 2,18% del capital social de DIA, a pesar de reconocer que LetterOne tiene el 77% del capital, subrayan que la compañía es una empresa cotizada y que deben preservarse los intereses de los accionistas minoritarios.
Historial de protestas en DIA
Western comenzó a invertir en DIA a mediados de 2018 y desde entonces ha venido protestando por esta situación. Desde este family office consideran que Letterone no apoya el nombramiento de un consejero que represente los intereses de los accionistas minoritarios, «lo que demuestra una falta de atención hacia ellos».
Fuentes de Western Gate explican a THE OBJECTIVE, ellos defienden la necesidad de tener en cuenta los intereses de los accionistas minoritarios, «a menudo descuidados por el Consejo de Administración de la empresa».
«Un representante minoritario aportará mas transparencia al proceso en un momento en que los accionistas del mayor accionista de DIA han sido sancionados. La aportación de un representante minoritario con experiencia en el sector mitigará el problema de la estructura que existe actualmente», explican estas fuentes.
DIA se defiende
Desde la cadena de supermercados explican que actualmente el consejo tiene una posición vacante, la que ocupaba doña Basola Vallés hasta su renuncia el pasado mes de abril tras unirse al grupo Salesforce.
El Consejo de Grupo DIA aduce que es un órgano robusto, «conformado por una mayoría de miembros independientes que aportan un sólido bagaje profesional y una visión multidisciplinar en todas las áreas del negocio». Así, en un comunicado, la enseña de supermercados se defiende de las acusaciones de Western Gate y aseguran que el consejo vela para que los procedimientos de selección de los consejeros fomenten la diversidad de conocimientos, experiencia, edad y género.
Sin embargo, Western Gate aboga por que el número de miembros del Consejo de Administración de DIA sea «proporcional» a la representación correspondiente a la estructura de su accionariado. «El Consejo debería permitir que los accionistas minoritarios al menos puedan nombrar un consejero, lo que garantizaría la representación de sus intereses en la empresa», aseguran.
No obstante, desde DIA responden que actualmente, ninguno de los accionistas minoritarios llega al umbral mínimo de capital para acceder a un asiento en el Consejo de Administración. Así las cosas, el minoritario considera que esta situación va en contra de las mejores prácticas de buen gobierno y apela a las orientaciones del supervisor bursátil (CNMV).
Dos años en ejercicio
Por otro lado, durante la junta, los accionistas de DIA aprobaron mayoritariamente la modificación de los estatutos sociales para reducir a dos años el plazo de ejercicio del cargo de consejero.
Además, salieron adelante el resto de los puntos que se recogían en el orden del día, tales como la aprobación de las cuentas anuales del ejercicio 2021 y la política de remuneraciones de los consejeros, entre otros.
Renovación de la marca
DIA está inmersa desde hace varios años en una renovación total de la compañía para intentar reducir su deuda y ganar rentabilidad. La compañía redujo sus ingresos netos en España del 4,2%, hasta los 1.000,2 millones, durante el primer trimestre del año. Desde la cadena de supermercados aseguran que este descenso «se se ve afectado por una reducción de la red de tiendas del 4,6%» en nuestro país.
La cadena de supermercados ha pasado en apenas siete años de segunda a cuarta posición en cuota de mercado, según hemos contado en THE OBJECTIVE.